Antonio Rodríguez Rico estudió magisterio, pero nunca ejerció, fue piloto de avión durante 18 años (parte de ellos extinguiendo incendios) y, por último, gestor de finanzas personales por las que empezó a interesarse hace unos 20 años. “Me formé de manera autodidacta y creé un blog de cierto éxito con una comunidad de seguidores muy fieles. Estudié un Máster en Mercados Bursátiles hace unos 12 años y en 2018 me lancé a crear Baelo Patrimonio” .

Baelo Patrimonio, hermano mayor del recien nacido Baelo Dividendo Creciente, es un fondo mixto moderado, no indexado pero gestionado “de forma muy pasiva” y al que le han dado han dado la calificación 5 estrellas, cinco años después de su nacimiento. “Es algo anecdótico”, señala Rico, “aunque a nadie le amarga un dulce en forma de reconocimiento”.

Y mientras Baelo Patrimonio sigue consolidando ese reconocimiento, hay que dar la bienvenida a Baelo Dividendo Creciente. Lanzado este mismo mes de mayo, es un fondo de renta variable global que invierte en compañías que destacan por su sólida política de reparto de dividendos. “Invierte en empresas de países que apenas tengan retención por dividendos en origen, lo que hace que sea fiscalmente eficiente en comparación con el resto de fondos del mercado”.

Hablamos de ‘fiscalidad amigable’, es decir, que el fondo no va a invertir en empresas de EEUU, Canadá o Japón, por ejemplo.

Y aunque la forma de invertir de Antonio Rico es muy pasiva y no tiene en cuenta la coyuntura del momento y su impacto en el mercado, yo le pido, para poner punto y final a esta charla, una serie de consejos para empresarios, políticos e inversores: “A los empresarios, darles ánimos para que sigan siendo el motor de la riqueza; a los políticos, darles ánimos para que cuiden del motor de la riqueza, y a los inversores, darles ánimos para que confíen…en las acciones de las empresas, que representan el motor de la riqueza”

-Primero estudió magisterio… ¿por…?

Mi hermana es Maestra, y 8 años mayor que yo. Por lo que recuerdo cuando era niño, creo que me sentí atraído también al ver su evolución en la universidad y el mercado laboral. Pienso que aún tengo vocación por el magisterio, aunque nunca haya llegado a ejercer la profesión.

-Después se puso a los mandos de un avión… ¿por?

Me tocó realizar el servicio militar en el último año que era obligatorio, pero conseguí que fuera a través de la milicia universitaria, que es una mili pero de oficial, no de soldado. Allí conocí a unos pilotos de helicópteros que me hablaron de cómo poder llegar a ser piloto, me gustó la idea, me puse a ello y dos años después estaba volando un avión en solitario por primera vez.

Mientras el comportamiento del inversor sea el correcto y su cartera esté adaptada a su perfil de riesgo, los truenos no tienen que afectar

-Fue piloto de extinción de incendios y, eso es duro ¿no?

Sí, posiblemente la especialidad de vuelo más dura. Es un vuelo manual, no por instrumentos. Necesitas estar al tanto de muchos riesgos en el mismo vuelo: Meteorología de la zona, baja altitud, interacción con muchas aeronaves, calor, humo, fuertes vientos, montañas, tendidos eléctricos, procedimientos para cada carga y descarga, tener en mente las posibles emergencias en vuelo a combatir,… Es el vuelo menos parecido al que todos tenemos en mente.

-Y ya dentro del mundo de las finanzas, de la gestión, ¿cuántos incendios ha tenido que apagar?

No muchos, pero alguno gordo hemos tenido. El peor fue cuando se juntó el inicio de la pandemia y sus violentas caídas bursátiles con la quiebra de Esfera Capital. Por suerte, AndBank nos dio una solución muy rápida, y aquella situación me dio la oportunidad de sentir un gran orgullo por los partícipes de Baelo Patrimonio. En vez de mostrar su malestar por la desagradable incertidumbre, ¡se quejaban porque no podían suscribir más participaciones en las bajadas! Fue algo increíble.

-¿Cuál fue el punto de inflexión que le llevó a interesarse por el mundo de las finanzas personales?

Cuando estaba en la escuela de vuelo, compartía habitación con un compañero. Un día le vi leyendo una revista y cuando la soltó le pedí que me la prestara. Era una revista de finanzas e inversión, con sus estudios, análisis y recomendaciones sobre acciones y fondos. Un par de semanas después compré mis primeras acciones de Telefónica.

Pero si hay un punto de inflexión claro sobre mi motivación por las finanzas personales fue Padre Rico, Padre Pobre, de Kiyosaki. Es curioso porque me encanta releer libros de finanzas y hoy los de Kiyosaki me aburren, no me gustan nada, pero tengo que darle las gracias por ser ese libro interruptor que encendió una luz que se quedó conectada para siempre.

-¿Por qué el nombre de Baelo?

Está inspirado en Baelo Claudia, la ciudad romana situada en la maravillosa playa de Bolonia, en Cádiz. Es un lugar que ha soportado la erosión del tiempo durante 2000 años, sus columnas, aún en pie, nos sirven de inspiración para transmitir su fortaleza, y me evocan la actitud y coraje de mi hija, Claudia, que con 4 añitos fue diagnosticada de leucemia en 2015 y su actitud fue toda una lección de vida. Hoy está en remisión completa. El nombre del fondo es mi homenaje para ella.

AntonioRicoSentado

 

-Antes de hablar del recién nacido Baelo Dividendo Creciente, vamos hablar del más veterano: Baelo Patrimonio. ¿Me presenta el fondo en un par de párrafos? ¿Cómo se gesta?

Baelo Patrimonio es un fondo mixto moderado, no indexado pero gestionado de forma muy pasiva.

Los fondos responden a la necesidad del inversor rentista (o acumulador), que gusta de la diversificación que ofrecen desde una suscripción de 10 € 

Tiene las ventajas de la gestión pasiva por sus bajos costes y su baja rotación de activos, la eficiencia y moderación de una cartera equilibrada y la calidad histórica y demostrada de las acciones de dividendo creciente en la parte de renta variable.

Se gesta como resultado natural de las estrategias de inversión que traté junto a mis seguidores en mi blog durante 10 años, que provienen de los que son para mí los más grandes divulgadores financieros: John Bogle, William Bernstein, Harry Browne,…

-Las principales cifras sobre las que pivota el fondo, a día de hoy ¿son?

Es un fondo con una eficiencia de costes extraordinaria, hasta el punto de tener una rotación de activos del 0% o cerca del 0% en cada trimestre, lo que ahorra una barbaridad en gastos con respecto al resto de la industria de fondos.

En los últimos 5 años ha superado con mucha diferencia al resto de la categoría, pero esto es pasado. Las rentabilidades van y vienen pero los costes y los buenos hábitos de inversión deben permanecer.

-Le han dado la calificación 5 estrellas después de cinco años ¿no es así?

Sí, pero es algo anecdótico. A nadie le amarga un dulce en forma de reconocimiento, pero no hay ningún motivo por el que debamos pensar que un fondo lo va a hacer bien o mal en los siguientes 5 años independientemente de las estrellas que tenga hoy.

-Me cuentan que Baelo Patrimonio comparte en tiempo real su cartera de inversión.

Es algo en lo que Baelo también ha sido pionero. No puedo entender que exista barra libre para la opacidad y que un partícipe no sepa hasta dentro de 6 meses en lo que está invirtiendo el vehículo donde deposita sus ahorros. La transparencia es uno de los puntos fuertes de Baelo, y lo debe seguir siendo.

-Corríjame si me equivoco, pero creo que tiene un objetivo de rentabilidad en la inflación media más 3-4% y, con la situación actual, ¿se le está complicando la cosa?

Más que un objetivo, es una guía a tener en cuenta y a la que aspirar. Nada puede ser garantizado en inversión. La inflación histórica en los países desarrollados tiene una media anual del 3% aproximadamente y las bolsas le han sumado un 6%-7% más, también de media.

La bolsa es el mejor activo protector contra la inflación de largo plazo

Conseguir un 3%-4% extra a la inflación media con una cartera 60% renta variable es alcanzable en el largo plazo, pero hay que ser conscientes de que habrá ciclos de corto y medio plazo con alta inflación que serán difíciles de sobrellevar si nos obsesionamos con esa comparación. Es una aspiración a conseguir en el futuro como histórico de nuestra inversión total, no a conseguir en cada ciclo de x años.

-Que Antonio Rico sea bastante accesible en redes sociales y que cuide a los partícipes aclarando y resolviendo dudas, no es algo muy común en su profesión, ¿no es así?

No lo es, y creo que está cambiando. Es algo propio de los fondos de autor y pienso que es tremendamente positivo. La industria financiera se ha caracterizado en el pasado por la opacidad, los altos costes y la complejidad, características impropias de lo que para mí debe ser un buen servicio de inversión.

-Vamos ahora con Baelo Dividendo Creciente. ¿Nace necesariamente cómo una consecuencia lógica del Baelo Patrimonio?

-¿Nos lo presenta por favor?

Baelo Dividendo Creciente es un fondo enfocado en acciones con un historial destacado de crecimiento en sus dividendos.

No nace como consecuencia de Baelo Patrimonio, ni tampoco como un complemento a su hermano mayor. Es un fondo que tiene un inversor objetivo distinto, lo que lo hace un fondo diferente. Por supuesto pueden ser complementarios, pero no está pensado como un complemento. De hecho, pocos productos nacidos para complementar a otra cosa pueden ser excelentes.

-¿En qué empresas invierte?

Invierte en empresas de países que apenas tengan retención por dividendos en origen, lo que hace que sea fiscalmente eficiente en comparación con el resto de fondos del mercado. Deben tener un buen historial de crecimiento y estabilidad de los dividendos.

Tengo en seguimiento más de 200 acciones que podrían formar parte de la cartera hoy, o más adelante 

También poseer las características que buscamos los inversores en este tipo de estrategias y que aportan seguridad y valor al dividendo: Deuda controlada, Pay-out moderado, estabilidad y crecimiento de beneficios y una rentabilidad por dividendo que no sea sensiblemente baja en relación a la rentabilidad histórica para cada acción.

-Y yo como soy bastante ignorante en estos asuntos, me ha encantado aquello de que tiene ‘una fiscalidad amigable’. Pero, ¿alguna fiscalidad puede ser amigable?

Aquella que se acerque a cero… :)

-¿Eso supone que no va a invertir en empresas de EEUU, Canadá o Japón, por ejemplo…?

Así es. Aunque parezca complicado para este tipo de estrategias, no lo es, precisamente por el objetivo que busca la cartera.

Es cierto que Estados Unidos es el país con mayor tradición en aplicar una política de dividendos crecientes a los accionistas, y por tanto también es el país con más acciones para poder seleccionar. Pero en los países que tenemos disponibles sin retenciones en origen que lastren nuestra rentabilidad también encontramos una gran muestra de todos los sectores del mercado. Tengo en seguimiento más de 200 acciones que podrían formar parte de la cartera hoy, o más adelante si mejoran en los filtros que les hacemos pasar.

Si el objetivo es conseguir una bola de nieve de capitalización compuesta que tenga el menor lastre impositivo posible, en los países seleccionados disponemos de suficiente muestra como para conseguirlo.

-También me cuentan que el fondo te protege bien de la inflación y, eso, en este momento es muy interesante.

La bolsa es el mejor activo protector contra la inflación de largo plazo. Por otro lado, el crecimiento histórico de los dividendos ha sido muy superior al crecimiento del coste de la vida. Si el fondo está formado por acciones de dividendo creciente, sí, pienso que estamos bien protegidos tanto los partícipes de acumulación como los rentistas que eligen la clase de distribución. Siempre en términos de largo plazo.

La industria financiera se ha caracterizado en el pasado por la opacidad, los altos costes y la complejidad

-¿Qué tiene que decir a los que señalan que no aportar mucho frente a algunos ETFs de dividendos crecientes globales?

Un fondo de inversión y un ETF son activos distintos para inversores con perfiles distintos. Ni mejor ni peor, distintos. Por otro lado, habría que ver si esos ETFs a los que se refiere son de dividendos crecientes o simplemente de acciones dividenderas. En mi opinión, se pueden contar con los dedos de una mano los vehículos de inversión colectiva de temática dividendos que tenemos disponibles en España y que sean de dividendos crecientes y realmente eficientes. Igual me sobran más de la mitad de los dedos.

Se une que, la mayor parte de las veces en las que se compara un producto de inversión con otro o con un índice, suele ser poco útil o incluso perjudicial por resultar engañoso.

En cualquier caso, respondiendo a su pregunta, me parece algo muy positivo porque un fondo extraordinario es aquel del que merece la pena hablar. Nos fijamos en él porque es excepcional, novedoso e interesante. Merece la pena molestarse por buscarle rivales de entidad para compararlos.

Si la gama Baelo estuviera formada por fondos de escaso interés, nadie hablaría de ellos. Serían invisibles. Si se les busca rivales entre los mejores productos del mercado, para mí es un halago enorme.

El universo de los fondos de inversión es abrumadoramente grande. La gente está cada vez menos dispuesta a perder su tiempo para hablar de un producto que no represente nada novedoso, destacado o claramente útil. Si un producto cumple con esas características, merecerá la pena mencionarlo y compararlo en un mercado tan atestado.

-Este fondo responde a ¿qué necesidades concretas?

A la necesidad del inversor rentista (o acumulador), que gusta de la diversificación que ofrecen los fondos desde una suscripción de 10 € y que busca acciones de dividendos crecientes para conseguir sus objetivos, con una mayor eficiencia fiscal que otras opciones disponibles.

-Y, ¿a qué perfil de inversor?

El perfil de un inversor que planea disponer de un flujo de caja presente o futuro. Para ello dispone de dos clases, una de distribución para disfrutar de una renta mensual y creciente y una de acumulación para el inversor que aún no necesita de las rentas y prefiere ir engordando la bola de nieve de la capitalización compuesta, pero que puede ir experimentando, gracias a la transparencia del fondo, con lo que su cartera va generando de forma pasiva, aunque se reinvierta en más acciones en vez de cobrarlo en su cuenta corriente.

La inflación histórica en los países desarrollados tiene una media anual del 3% aproximadamente y las bolsas le han sumado un 6%-7% más, también de media

-Una tanda de preguntas rápidas sobre la actualidad si le parece:

-¿Le preocupa que la guerra de Ucrania se alargue?

Sí, como supongo que a cualquier persona. Pero me preocupa más desde el punto de vista humano que en relación a nuestras posibilidades de inversión.

Mi forma de invertir es muy pasiva y no tiene en cuenta la coyuntura del momento de mercado.

-Y, ¿la tensión entre EEUU y China?

Siempre hubo tensiones entre las grandes potencias mundiales, las hay y las habrá. Ninguna ha conseguido que la bolsa no sea el mejor activo en el que el ciudadano medio puede invertir para protegerse de la inflación de largo plazo.

-Dicen que EEUU se frena y se vuelve a hablar de recesión

Mercado alcista: Malo para el ahorrador. Bueno para el jubilado.

Mercado bajista: Bueno para el ahorrador. Malo para el jubilado.

Nunca sabremos lo que depara el incierto futuro. Mientras el comportamiento del inversor sea el correcto y su cartera esté adaptada a su perfil de riesgo, los truenos no tienen que afectar.

No puedo entender que exista barra libre para la opacidad y que un partícipe no sepa hasta dentro de 6 meses en lo que está invirtiendo 

-¿Qué no debemos perder de vista, la deuda, la inflación y?

Nuestro comportamiento. Debemos respetar nuestro proceso de inversión, que está planificado desde la calma y no desde el nerviosismo y la incertidumbre del día a día en los mercados.

-¿Hasta qué punto le inquieta que en España estemos en año electoral justo cuando tenemos la economía de… ‘aquella manera’?

No suelo prestar excesiva atención a la política. En cualquier caso, me gustaría que todo fuese de color de rosas en nuestra economía, pero en esos casos es difícil invertir con una expectativa de rentabilidad elevada. Si aún me quedan muchos años para retirarme, prefiero que mis ahorros sean invertidos en tiempos en los que el inversor medio desconfía y es temeroso. Cuando la situación es muy positiva y los activos han subido al calor del buen clima económico, la opción más probable es volver a la media…

-Por último, un consejo para los empresarios, los políticos y para los inversores, por favor.

A los empresarios, darles ánimos para que sigan siendo el motor de la riqueza.

A los políticos, darles ánimos para que también cuiden del motor de la riqueza.

A los inversores, darles ánimos para que confíen el mayor peso posible que les permita su perfil de riesgo a las acciones de las empresas, que representan el motor de la riqueza.