La noticia es esta: Indra quiere dar el salto al espacio y comprar la empresa pública de satélites Hispasat, actualmente presidida por Jordi Hereu y propiedad de Redeia (89,7%), SEPI (7,4%) y el Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (CDTI) (2,9%). Cuando la entonces Red Eléctrica -ahora Redeia- compró Hispasat a Abertis, en 2019, se valoró la compañía en algo más de 1.000 millones de euros, una cantidad considerable, hasta para Indra.

La operación tiene todo el sentido del mundo dentro del plan global que consiste en convertir Indra en el eje del polo militar industrial español y europeo. A fin de cuentas, Hispasat, a su vez, es accionista de Hisdesat, operadora española de satélites gubernamentales de uso tanto civil como, sobre todo, militar. 

Ahora bien, en la lista de deseos de la compañía que preside Marc Murtra y dirige ahora José Vicente de los Mozos, también está ITP, actualmente en manos de Bain Capital y de la que Indra compró el 9,5% en agosto, por 175 millones de euros. Tranquilos, el objetivo de Indra es hacerse con el control de la compañía con sede en Zamudio, aunque Bain, que es un fondo y venderá cuando llegue el momento, se ha propuesto no hacerlo por debajo de 2.400 millones.

Si la presidencia de Fernando Abril-Martorell estuvo marcada por adquisiciones en el terreno de la digitalización, la era Murtra pretende expandir la compañía en el ámbito de las comunicaciones y la Defensa. Por cierto, desde que Murtra fue nombrado presidente -mayo de 2021-, los títulos del grupo han pasado de los 7,10 euros a los 13,86 euros por acción a los que ha cerrado este lunes. No está mal.