Curioso: el juez Manuel García-Castellón, de la Audiencia Nacional, propone juzgar al comisario Villarejo y al jefe de Seguridad de Iberdrola, Antonio Asenjo, por los trabajos encargados por Iberdrola para espiar a sus competidores y adversarios externos, e incluso a sus directivos y consejeros internos, espionajes por lo que el tristemente famoso comisario, a través de su empresa Cenyt, especializada en grabar teléfonos ajenos, cobró de Iberdrola, según el juez, 1.455.000 euros.

Espionajes, insisto, de lo más diverso: desde espiar la vida de consejeros del grupo Iberdrola, hasta de cualquier grupo o institución, publica o privada, que se opusiera a los proyectos de Ignacio Galán, fuera para poner en marcha una central renovable o un ciclo combinado.

Cuesta creer que, 'motu proppio', Antonio Asenjo, un responsable de Seguridad, pudiera pagar a Villarejo hasta un total de casi millón y medio de euros, a un policía que grababa ilegalmente conversaciones ajenas

Lo que el auto no aclara es lo referente al caso más morboso, el presunto espionaje de Iberdrola a Florentino Pérez, el hombre que quiso hacerse con el control de Iberdrola y ante el que resistió y consiguió que no entrara, Ignacio Galán.

Lo curioso del enfrentamiento ACS-Iberdrola a través de Villarejo, es que el presidente de la eléctrica salió indemne, al igual que Florentino, porque hubo amenazas de denuncias cruzadas entre ambos... mientras que el responsable de Seguridad de Iberdrola, Antonio Asenjo, será juzgado.

Asenjo era un hombre de la máxima confianza de Galán desde Airtel-Vodafone, y ayudó a Galán a acelerar la salida del presidente de Iberdrola, Íñigo de Oriol, para que don Ignacio tomara todo el poder en la primera eléctrica de España.

En como si en el caso paralelo, Villarejo-BBVA, hubiera resultado encausado el jefe de Seguridad de BBVA, Julio Corrochano, y que hubiesen exonerado a Francisco González.  Entre otras cosas porque cuesta creer que, 'motu proppio', Antonio Asenjo, un responsable de Seguridad, pudiera pagar a Villarejo hasta un total de casi millón y medio de euros, a un policía que grababa ilegalmente conversaciones ajenas.

Principios del presente siglo: fue una época de juego sucio, de encanallamiento de las relaciones empresariales... que no sabemos si continúa hoy, en 2024

En un primer momento, cuando se descubrió el pastel, Asenjo plantó cara a Galán cuando este quiso que corriera con toda la responsabilidad de que Iberdrola contratara a Villarejo (un policía en activo, por tanto sospechoso de cohecho) pero luego ha parecido aceptar su suerte, no sé si a cambio de algo. En cualquier caso, el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, fue exonerado y ahora el juez García-Castellón enjuiciará al jefe de Seguridad de Iberdrola y al policía Villarejo.

En cualquier caso, ahora, en 2024, hay que preguntarse si la práctica empresarial de principios de siglo, consistente en pagar por el espionaje de la vida profesional y personal del adversario, así como de abogados, periodistas, etc, continúa vigente con otros nombres, que no sean Villarejo... o desde el propio Estado.

Aquella fue una época de juego sucio, de encanallamiento de las relaciones empresariales... que no sabemos si continúa hoy, en 2024.