El presidente de Ibercaja, Francisco Serrano, y el Consejero Delegado, Víctor Manuel Iglesias
Lo explica la entidad aragonesa en su hecho relevante enviado a la CNMV: lanzará a bolsa el 42% del capital. Ibercaja es propiedad de la Fundación Ibercaja, que posee un 88% del banco. Pero la antigua Ibercaja -no confundir con Banco Ibercaja- suma también las participaciones de las fundaciones propietarias de otras tres entidades absorbidas -dicho sea de paso- sin ayudas públicas: tres cajas de ahorros, en su conjunto, poseen el 12% restante del capital.
Por decirlo de otro modo: Ibercaja, con toda razón, se ha rendido a la presiones del supervisor, ahora el BCE, que odia a las cajas de ahorros y sólo admite bancos y cotizando en bolsa.
Con toda razón, la caja ahora presidida por Francisco Serrano, ha preferido mantener la mayoría a través de las fundaciones de bancos filiales. De esta forma, aunque es cierto que Fundación Ibercaja se queda en teoría en minoría, pero en la práctica y siempre a través de la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País, corazón de la entidad, controlará un 58% del banco.
Y conste que Ibercaja tiene toda la razón al negarse a salir a bolsa, dado que la banca española sigue cotizando con un descuento feroz, que suele superar el 50%. ¿Por qué tirar más de la mitad del valor de una entidad cuando Ibercaja, como tantas otras, que no tiene problemas de solvencia y de buena gana seguiría siendo caja de ahorros?