GlaxoSmithKline (GSK) ganó hasta septiembre 5.768 millones de euros,  un 135,1% más que en el mismo periodo del año anterior, según ha informado el laboratorio británico, que comercializa medicamentos como Augmentine, Bactroban o Clamoxyl. 

Los ingresos alcanzaron los 27.306 millones de euros, un 3,4% más. 

En ese sentido, por segmentos, el de medicinas especializadas facturó 10.979 millones de euros, un 14% más. Las medicinas generales facturaron 8.534 millones de euros, un 4% menos. Mientras que las vacunas se quedaron en los 7.794 millones de euros, un 1% menos. 

La consejera delegada de GSK, Emma Walmsley -que dejará el puesto el 1 de enero para ser sustituida por Luke Miels— valoró: “El impulso de GSK continúa con otro trimestre de sólidos resultados, lo que respalda la mejora de las previsiones para 2025 y nos sitúa en una buena posición para 2026 y para cumplir con nuestras perspectivas de crecimiento a largo plazo”. 

Y añadió: “Las ventas crecieron en todos los segmentos, con resultados especialmente sólidos en medicinas especializadas gracias al crecimiento de dos dígitos en [las áreas de] inflamaciones e inmunología respiratoria, oncología y VIH”.