En Hispanidad hemos hablado cómo Moncloa celebra mes tras mes el gran éxito del Ministro Escriva: "El Ingreso Mínimo Vital (IMV) ha alcanzado a 611.029 hogares en los que viven 1.752.467 personas". 

La intención es llegar al "máximo" de hogares. Según datos del Ministerio, "uno de cada cuatro" potenciales beneficiarios del IMV aún no conocen la prestación. Y es que, si la previsión del Gobierno era que llegaría a 850.000 hogares, vamos camino de que el IMV cumpla tres años y apenas ha llegado a 600.000 hogares. Y encima Moncloa anuncia a bombo y platillo que se ha llegado a 1.752.467 personas. ¡Toma ya! ¡Ánimo, Ministro, en otros tres años, igual alcanzas el 80% de lo que prometiste! ¡Grande sos, Escrivá!

A lo que hay que sumar que esta semana conocíamos a una de las beneficiarias del Ingreso Mínimo Vital: una okupa de Alcobendas que asegura que 'sólo' cobran el Ingreso Mínimo Vital: 869 euros y con eso... "es que no puedes". Y claro, tienen que okupar el piso ajeno. Y con eso y okupando... tampoco, que uno tiene sus gastos.

El Ministro sigue puliendo su gran medida, incluso siendo ya Ministro en funciones, y ahora se ha propuesto recuperar los cobros indebidos del IMV. Para hacerlo lo más rápido posible, ha puesto en marcha un plan de horas extraordinarias para los funcionarios con el objetivo de reclamar a las personas que hayan recibido más dinero del que les correspondía. 

Cuando una persona solicita el IMV, el ministerio cruza datos con la Agencia Tributaria, pero las rentas pueden no estar actualizadas, por lo que hay veces que la cuantía que percibe el beneficiario puede ser superior a la que verdaderamente tiene que recibir. 

Según la documentación a la que ha tenido acceso El Independiente ha informado a los empleados públicos que “dado el importante número de deudas pendientes por reclamar que se han venido generando […] resulta necesaria la implantación de un nuevo plan de intensificación que agilice el procedimiento de reintegro de las prestaciones indebidamente percibidas”.

A cambio, los empleados públicos recibirán un pago por esas gestiones extra. Según detalla el medio, "la administración abonará 10,5 euros por cada acuerdo de inicio tramitado y por cada resolución definitiva de deuda emitida. A 3,5 euros se pagarán las resoluciones de aplicación del procedimiento de compensación directa. El INSS calcula que para las tareas mejor pagadas se destinarán unos 30 minutos, mientras que para las resoluciones de compensación se necesitan unos 10 minutos".

Y sin despistarnos de lo importante, el Ingreso Mínimo Vital, funciona de pena, es una prestación aprobada del día a la mañana y sin el personal necesario para que se tramite de manera correcta. Es más, el 73% de las solicitudes del ingreso se deniegan, y no deja de ser una limosna: un dinero que el Gobierno recoge de los ciudadanos que pagan impuestos y se lo ofrece a los necesitados, según el criterio del Ejecutivo... ¡a cambio de nada y se supone que para siempre jamás! El IMV supone, de paso, el vaciamiento moral de España: ¿para qué trabajar 40 horas a la semana por 950 euros al mes si puedo cobrar 1.000 sin dar ni golpe?