El Ibex 35 ha terminado esta sesión del 15 de enero en los 10. 076 puntos, prácticamente en niveles de apertura. ArcelorMittal ha subido un 0,18% hasta los 24,43 euros.

Deslocalización silenciosa. Es lo el objetivo que puede estar detrás de las últimas decisiones tomadas o pendientes de ejecutar por parte de ArcelorMittal.

Es decir, la acerera deja de invertir en determinadas plantas de determinados países… de Europa concretamente, para hacerlo en otros lugares como la India, Estados Unidos o Canadá.

“La estrategia de inversión de la compañía”, explican los expertos, “se asienta en dos objetivos: aumentar la producción en aquellos países en proceso de desarrollo, y descarbonizar los mecanismos de producción en los que ya han implantado restricciones ambientales y que ofrecen ayudas para adaptarse al nuevo modelo de transición verde”.

Y si estos plazos son más laxos, y las ayudas más suculentas, mejor que mejor para Arcelor.

El beneficio neto de ArcelorMittal durante los primeros nueve meses de 2023 ha caído un 57% hasta los 3.885 millones de dólares arrastrado por la menor demanda de acero para la construcción

Por ejemplo, a bombo y platillo, el presidente ejecutivo de la multinacional, Lakshmi Mittal, anunciaba, hace apenas unos días, que el grupo construirá en la India la mayor siderúrgica del mundo que producirá alrededor de 24 millones de toneladas de acero. Un proyecto a largo plazo, del que no que ha transcendido a cuánto asciende la inversión, y que finalizará en 2029.

Al mismo tiempo, la compañía, que en un 37% pertenece a su presidente ejecutivo, no pierde de vista Estados Unidos cuya ley de reducción de la inflación tiene 400.000 millones disponibles para empresas que apuesten por la transición energética.

ArcelorMittal ya está presente en el país tras la compra del 80% de la planta de Voestalpine (Corpus Christi, Texas), y también quiso comprar US Steel pero finalmente la nipona Nippon Steel se quedó con ella.

Por cierto, Arcerlor y la japonesa son los dueños de otra planta localizada en Alabama, y son socios en AMNS India, propietaria de la factoría india que va a ser ampliada.

También en Canada la multinacional está desarrollando proyectos pioneros. La de Dofasco, en Ontario, es única planta de DRI (reducción directa del mineral de hierro) que Arcelor está levantado en todo el mundo.

Todo esto en detrimento de su estrategia europea. Antes hay que explicar que, tanto en Canadá como en Estados Unidos, todo lo que tenga que ver con la transición energética o la descarbonización, tiene plazos, en algunos casos, más relajados, y las ayudas son más suculentas que las que puede recibir, por ejemplo, de España (vía Unión Europea).

El contencioso más enquistado es el que mantiene con el Gobierno italiano por las reticencias de la multinacional para reflotar la planta de Ilva, la mayor planta siderúrgica europea

En concreto, la planta que Arcelor tiene en Gijon está pendiente, hace más de un año, de que se ponga en marcha un proyecto de DRI similar al canadiense.

Al parecer, y según los expertos, los requisitos establecidos respecto a los plazos para ejecutar el proyecto son inasumibles por Arcelor. Pero, de que se cumplan o no esos requisitos depende que llegue la ayuda europea por 450 millones.

Obras también de DRI tiene Arcelor por ejecutar en Alemania, Francia o Bélgica.

Pero el contencioso más enquistado es el mantiene con el Gobierno italiano por las reticencias de la multinacional para reflotar la planta de Ilva, la mayor planta siderúrgica europea, a pesar de que el Ejecutivo Meloni está dispuesto a asumir la mayor parte de la inversión.

También en este caso, la cosa va de plazos puesto que Arcelor Mittal ya advirtió de lo complicado que era cumplir con los planes estratégicos previstos por las nuevas exigencias medioambientales en el país.

Comprar Ilva fue en su momento (2018) una gran apuesta de Arcelor, pero descubrió después que no era lo que esperaba y estuvo a punto de tirar la toalla… hasta que llegó el Estado italiano que, en 2021, entró en el accionariado de la factoría.

En lo que llevamos de enero, su cotización cae un 3,5% y su capitalización actual (20.795 millones) es 10.500 millones menos que la que tenía en 2021

Lo cierto es que ArcelorMittal, en medio de este sudoku de proyectos, no ha empezado bien el año en Bolsa.

En lo que llevamos de enero, su cotización cae un 3,5% y su capitalización actual (20.795 millones) es 10.500 millones menos que la que tenía en 2021…que ya es decir.

Cerró 2023 con caídas cercanas al 15%.

Además, el beneficio neto de ArcelorMittal durante los primeros nueve meses de 2023 ha caído un 57% hasta los 3.885 millones de dólares, un descenso significativo arrastrado por la menor demanda de acero para la construcción.