A Alibaba no le hace falta copiar a sus vendedores y competir con ellos, como hace Amazon, y también la va bastante mejor que al japonés Rakuten. Además, la bolsa ha premiado los aumentos de beneficio neto, resultado bruto de explotación (ebitda) e ingresos que ha presentado en su ejercicio fiscal (abril de 2022 a marzo de 2023). Pero ojo, porque ha reducido plantilla un 7,7%, a 235.000 empleados.

El gigante chino de comercio eléctrico ha logrado un beneficio neto de 9.763 millones de euros, lo que supone un 17% más que en el ejercicio anterior. Asimismo, el ebitda ajustado ha crecido un 11%, a 23.660 millones, y han mejorado los márgenes: el margen ebitda ha pasado del 19% al 20%, y el margen operativo ha subido del 8% al 12%.

Los ingresos de Alibaba han ascendido un 2%, 116.972 millones, sobre todo, por la recuperación de la actividad en China tras el fin de las restricciones Covid, que ha aportado 78.467 millones y representa el 67% de la facturación total. Le sigue el negocio de la nube, con 10.392 millones; y el negocio internacional, con 9.319 millones (y sin olvidar que busca crecer en España). 

Unos buenos resultados donde se cumple la previsión de recuperación que hizo hace unos meses y se mejora la presencia de la compañía que lidera Daniel Zhang como presidente y CEO desde el adiós de su fundador, Jack Ma. Recuerden que a este último le han salido caras sus críticas al Partido Comunista Chino porque no sólo tuvo que dejar la presidencia de Alibaba en septiembre de 2009 y se pasó a la filantropía, sino que más tarde, en enero de este año, perdió el control de Ant Group. Hace casi dos meses, el gigante chino anunció su apuesta por el ‘esquema Villalonga’ (el que puso en marcha Juan Villalonga cuando presidía Telefónica, bajo el principio infundado y muy anglosajón de que la suma de las partes vale más que el todo), días después de la reaparición de Ma en China. En concreto se escindirá en seis compañías para aprovechar oportunidades de mercado, estimular el crecimiento y ser “más ágiles”. Un movimiento que gusta al mercado, y por ende, a los inversores, entre los que figura el estadounidense Michael Burry, médico y fundador del fondo Scion, que ha duplicado su participación-.

Paralelamente, la Comisión Europea ha realizado una reforma aduanera por la que Amazon, Zalando o Alibaba, entre otras, deberán asegurarse de que los artículos que ofrecen se pueden importar a la Unión Europea y en caso de que hiciera falta pagar un impuesto o hacer un trámite extra que no preveían, deberán asumirlo, no los consumidores. “Los consumidores ya no serán golpeados con gastos ocultos o burocracia inesperada justo antes de recibir el paquete”, ha subrayado el comisario europeo de Economía, el italiano Paolo Gentiloni.