En la tarde/noche del día de ayer, 26 de octubre de 2023, el grupo de servicios de asesoramiento financiero Alantra publicó sus resultados a cierre del tercer trimestre de 2023. Resultados que como ya hemos estado viendo en anteriores períodos intermedios no han sido buenos, al menos de manera comparativa con las cifras del grupo respecto a los años anteriores 2021 y 2022. Alantra, el principal banco de inversión español, ha publicado un beneficio neto atribuible de 4,4 millones de euros, que si bien es un resultado positivo es inferior en un 83% al del mismo resultado obtenido a cierre de los primeros nueves meses de 2022. Veremos cómo amanece la cotización del grupo en el día de hoy tras el impacto de sus resultados en el mercado. A priori, no pinta bien, pero ya saben, a veces hay sorpresas. En el último mes, la evolución del precio de la acción de Alantra ha sido negativa, con un descenso en términos acumulados del 2,36%, si bien en el día de ayer su precio aumentó en un 2,48% respecto al cierre de la sesión del día anterior.

Dejando a un lado el mercado bursátil por el momento, sigamos con el análisis de las principales magnitudes que componen el resultado. El grupo ha descendido sus ingresos netos de su división de Gestión de Activos, en concepto de comisiones de gestión y de éxito, en un 15,5% y de igual manera de su división de Investment Banking, en un 21,9%. Asimismo, este decremento generalizado de los ingresos se ha visto también en la división del grupo Credit Portfolio Advisory la cual ha disminuido sus ingresos en un 44,4%. Los ingresos del área de negocio Investment Banking han disminuido desde los 101,3 millones de euros a los 79,1 millones de euros, los del área de Credit Portfolio Advisory desde los 37,6 millones de euros a los 20,9 millones de euros y los del área de Gestión de Activos desde los 26 millones de euros a los 22 millones de euros. Todo ello ha provocado, junto con la partida de otros ingresos de explotación, que los ingresos netos hayan experimentado en los primeros nueve meses de 2023 una variación negativa del 25,9%, evolución muy similar a la experimentada por el grupo desde el 2021 al 2022, del 25,8%, respecto a la misma cifra del tercer trimestre del año 2022.

La entidad vuelve a reducir, como ya vimos en períodos intermedios anteriores, sus gastos variables de personal en un 58,2%

Bueno, al menos ante estas cifras tan malas de ingresos, Alantra ha descendido también sus gastos en igual comparativa. Los gastos de explotación han disminuido en un 10%. La entidad vuelve a reducir, como ya vimos en períodos intermedios anteriores, sus gastos variables de personal en un 58,2%, si bien ha incrementado sus gastos fijos de personal lo que indica que ha pagado menos comisiones variables dependientes de los beneficios obtenidos que en el período anterior. Ello es evidente dado que como bien saben, el año 2023 está siendo un año bastante convulso para los mercados, cuando parece que hay calma, estalla la guerra en Israel o alguna otra noticia que deja patidifuso al mercado. Todo ello evidencia el apalancamiento operativo del modelo de negocio del grupo.

La diferencia entre los ingresos netos y gastos de explotación a cierre del tercer trimestre de 2023, que resulta en el resultado de explotación del grupo, ha disminuido respecto al cierre del año anterior en un 94%, pasando de ser de 31,4 millones de euros a 1,9 millones de euros.

Analicemos ahora de manera breve el balance. Poco que decir, mantiene un balance sólido a cierre del tercer trimestre de 2023 con escasas variaciones respecto al primer semestre de 2023. El activo total se ha reducido en tan solo un 0,6%, principalmente por un descenso del activo corriente en un 2%. Especialmente relevante es que el grupo ha aumentado su liquidez. El efectivo de Alantra ha sido de 98,1 millones de euros, un 1,2% inferior a la misma cifra del primer semestre de 2023. Cifra que al cierre del tercer trimestre de 2023, representa el 63% del total del activo corriente en el período. El resto del activo corriente, 37%, viene representado principalmente en un 34% por la partida de deudores comerciales y otras cuentas a cobrar.

Por otro lado, el banco ha disminuido su estructura de pasivo, lo que nos gusta mucho, más aún cuando disminuye el pasivo corriente o lo que es lo mismo, deuda a corto plazo que vence en un plazo inferior a un año. El grupo ha disminuido su pasivo corriente en un 8,5% hasta los 47,1 millones de euros, cifra que se sitúa todavía muy por debajo del activo corriente antes mencionado, por lo que no deberíamos preocuparnos demasiado pese a la importancia de la cuantía. La mayoría de este pasivo corresponde a acreedores comerciales y otras cuentas a pagar.

La estructura de pasivo corriente del grupo se compone principalmente de deudas que este mantiene con su personal, estructura de deuda a corto plazo muy diferente a la de un negocio industrial o bancario

Al igual que ocurrió en nuestro análisis de las cifras del grupo del año 2022 de manera comparativa con el año 2021, la presentación de resultados del tercer trimestre de 2023 no muestra detalle alguno de la composición de cada una de las partidas antes descritas que componen el balance, de especial importancia en el caso de las cuentas deudores comerciales y otras cuentas a cobrar del activo corriente y de acreedores comerciales y otras cuentas a pagar. En el caso del pasivo corriente, nos hemos dirigido a las cuentas anuales auditadas del ejercicio 2022 para ver de qué se componen las mismas, dada su importancia dentro del balance, para darle algo de claridad a nuestro querido lector. Pues bien, en la nota 10 de la memoria de Alantra de 2022 se pone de manifiesto que la partida del activo corriente de deudores comerciales y otras cuentas a cobrar se genera en concepto de derechos de crédito que tiene el grupo en contra de sus clientes por la prestación de servicios empresariales y de asesoramiento. Respecto a la partida del pasivo de acreedores comerciales y otras cuentas a pagar, detallada en la nota 18 de las cuentas anuales del grupo de 2021, estos importes corresponden principalmente a remuneraciones pendientes de pago a empleados y personal de la Alta Dirección así como, en menor medida, a Administraciones Públicas. Es decir, la estructura de pasivo corriente del grupo se compone principalmente de deudas que este mantiene con su personal, estructura de deuda a corto plazo muy diferente a la de un negocio industrial o bancario.

Volviendo a la bolsa, Alantra cotiza este viernes con una caída del 1,1%, hasta los 8,9 euros por acción. La firma vale actualmente 350,7 millones de euros, muy lejos de los 591 millones de 2021 y de los 465,5 millones de 2022.

Como breve conclusión, Alantra ha empeorado de manera considerable su resultado en el tercer trimestre de 2023 respecto al mismo trimestre de 2022. Sin embargo, no es todo malo. El grupo sigue descendiendo periódicamente su estructura de pasivo corriente y sus gastos de explotación de manera comparativa con los períodos anteriores.