Publica La Celosía una interesante nota sobre la ausencia de culpa que experimenta el gigante Amazon. Bezos, rey del comercio electrónico asegura que los pequeños comercios venden más gracias a ellos. Vamos que no es el depredador de lo pequeño, sino el promotor del minicomercio. Y si alguien se lo cree, pues sin problemas.

La lucha contra el monopolio no es una cuestión comercial: es igualdad de oportunidades, algo mucho más importante

Ahora bien, si se quiere detener el peligroso monopolio Amazon la idea es muy simple: prohíbasele fabricar o vender marca blanca. Que el productor no venda y el vendedor no produzca. Es lo mismo que hicieron los norteamericanos cincuenta años atrás, cuando la industria audiovisual, con la TV por bandera empezó a ser la industria más importante de los Estados Unidos: el emisor no podría producir y el productor no podrá emitir. De hecho se combinó con una normativa antimonopolio. Las emisora de radio y TV federales no podrían tener internet licencias estatales y las estatales no podría disponer de licencias federales.

En cualquier caso,¡qué cara más dura tienes, Jeff Bezos!

Así, durante más de un cuarto de siglo y cuando ya hubo competidores fuertes se liberalizó el sector.

Y no es una cuestión baladí, aunque no se trate de comercio. El cuasi monopolio de Jeff Bezos es un peligro. No para la libertad de comercio sino para algo mucho más relevante: la igualdad de oportunidades.

En cualquier caso, ¡qué cara más dura tienes, Jeff Bezos! ¿Así que ayudas al pequeño comercio, desgraciado?