“Estamos de vuelta en el mercado”, afirmó este jueves el CEO de Orange España, Jean-François Fallacher, durante la presentación a la prensa de los resultados de 2020. Así es: tras varios trimestres perdiendo clientes, la teleco logró dar un nuevo impulso comercial durante el segundo semestre y aumentar el número de clientes convergentes (+51.000), de fibra (+164.000) y de móvil (+110.000), su verdadero talón de Aquiles que cerró el ejercicio con 15,9 millones de clientes, un 2,4% menos que en 2019.

Orange le ha dado la vuelta a la pérdida de usuarios gracias a ofertas muy agresivas, especialmente durante la ‘vuelta al cole’, y ahora debe darle la vuelta a la cuenta de resultados, que registró una caída de los ingresos del 5,9%, hasta 4.951 millones de euros y un Ebitda de 1.433 millones, un 13% inferior al del año anterior.

En otras palabras, sumar clientes no es suficiente y para hacer rentable el negocio en un mercado tan competitivo es necesario recortar los gastos, por ejemplo, los de personal. “Lo único que puedo decir es que estoy muy orgulloso de la plantilla”, aseguró ante la insistencia de los informadores sobre la posibilidad de aplicar un ERE, una medida que, por otra parte, ya tomaron Telefónica y Vodafone.

La estrategia de Orange consistirá, en cualquier caso, en “simplificar” su porfolio de marcas, aunque no aclaró si eso implicará prescindir de alguna de ellas. De momento, siguen activas todas ellas: Orange, Jazztel, Amena, Simyo y República Móvil.

Una vía para ganar rentabilidad, según Fallacher, es mediante fusiones, en un sector en el que actualmente hay “demasiados actores”. “Apoyamos con fuerza cualquier consolidación del mercado, con o sin nosotros” afirmó el CEO, que aseguró que Orange España está “muy abierta” a cualquier oportunidad que surja.

Derechos del fútbol: Fallacher no está de acuerdo con la fórmula que impone Telefónica y que consiste en pagar en función del número de suscriptores de televisión, tengan o no contratado el fútbol. “Debería ser en función de aquellos que decidan tener el fútbol porque, si no, estamos pagando también por los que no quieren tener fútbol de pago”, explicó, para luego dar en el clavo: “El fútbol y la industria del entretenimiento ya no produce lo que antes”, aseguró. Así las cosas, Fallacher ha decidido acudir a Competencia: “Estamos en contacto con la CNMC”, señaló.

Sea como fuere, a pesar de tener un coste “muy alto”, el fútbol continúa siendo un activo muy importante para la teleco, la única que lo ofrece, junto a Movistar, después de que Vodafone decidiera suprimirlo de su oferta comercial.

Orange España acudirá a la subasta de la banda de 700 MHz para el 5G, a pesar del precio de salida establecido por el Gobierno y que Fallacher considera “caro”.

Y para terminar, la creación de Totem, la filial del grupo francés que aglutinará las 17.600 torres que posee la teleco en Francia y las 7.900 que tiene en España. Orange no sólo no contempla vender ese negocio, sino que lo considera estratégico: "Son activos críticos y queremos mantener el control", aseguró Fallacher.