En la sesión de control al Gobierno, la diputada de Vox, Macarena Olona, ha preguntado al vicepresidente podemita Pablo Iglesias: "Señor Iglesias, si uno echa la vista atrás qué lejos queda ese año 2015 en el que su formación salía a las calles buscando democracia real. Parecería que ha transcurrido toda una vida desde que llenaron este hemiciclo de esperanzas, las de los más de 5 millones de españoles cuyo dolor supieron politizar perfectamente y rentabilizar en 69 escaños. Pero qué nos queda de aquellas promesas, qué fácil ha sido pasar de la lucha en las calles con el puño alzado a los posados en las revistas del corazón al más puro estilo Isabel Preysler de Galapagar. El cielo no se toma por consensos, se toma por asalto. Ese es al asalto a los cielos que usted prometió a los españoles en el año 2015". "Basta con examinar cualquier sesión plenaria de este cámara para comprobar que usted y su formación en modo alguno han democratizado la política, antes al contrario, lo que han hecho es vulgarizar la democracia. Y no es una cuestión de clases, es una cuestión de saber estar, porque hoy usted es esa casta. No va a dimitir por una sencilla razón: fuera de ese escaño al que se agarra y su silla en la Moncloa, no le queda nada". "Y aquellos a los que estaba usted llamado representar y hoy insulta cuando se confiesan votantes de Vox", "cuando se cruzan con usted lo hacen al grito de vendeobreros. No podría enumerar por falta de tiempo las innumerables promesas políticas que usted ha incumplido por falta de tiempo, desde la fusión de Caixabank con Bankia hasta esa chapuza de la ley de libertad sexual". "Ustedes prometieron limpiar la casta que según usted representaba el PP y el PSOE. ¿Qué pasa, señor Iglesias, me está viendo, que la cal ya no es tan viva desde la Moncloa? Desde que se conocía la imputación de su partido en el pasado mes de agosto estamos esperando que usted y su Gobierno socialcomunista dé cumplidas explicaciones". "Solo le haré una pregunta: el conveniente cambio de versión de su concubina judicial, la señora Dina, exculpándole ahora ante la Audiencia Nacional, ¿tiene algo que ver con el hecho coincidente en el tempo de haberle montado un panfleto digital? Señor Iglesias, cese en su huida y dimita porque dimitir no es un nombre ruso".

En su respuesta, Iglesias se ha mofado de que Santiago Abascal llevara una mascarilla de la Brigada Paracaidista cuando intentó "librarse del servicio militar". "A ustedes les gustaría que tuviéramos una justicia como en la dictadura, que persiguiera a los demócratas". "Cuando les llamamos fascistas nos equivocamos, son la derecha de toda la vida que pretende tapar sus complejos con símbolos militares en las mascarillas".

Macarena Olona le ha espetado a Iglesias: "Nos veremos en la próxima sesión de control"

E Iglesias ha respondido: "Como caballero retado me toca elegir las armas: la palabra".

Y la guinda de la tarta: la Audiencia Nacional vuelve a considerar 'perjudicado' a Pablo Iglesias. Es decir, que el verdugo vuelve a convertirse en víctima. Si quieren triunfar en los tribunales, no lo duden: vayan de la mano de Podemos. 

A pesr de tan exquisita respuesta, lo cierto es que el término 'concubina' de Olona es una alusión a la sospecha generalizada de que el caso Dina no es sino un montaje de Pablo Iglesias para ocultar una relación sexual como una operación de las "cloacas" del Estado" contra Podemos. Lo segundo, desde luego, no cuela.