Zuckerberg debería ser removido del control de Facebook”, afirmó George Soros durante una cena en Davos (Suiza), en febrero de este año. El filántropo nacionalizado norteamericano y de origen húngaro, argumentó que el fundador de Facebook había ayudado a Donald Trump a ganar las elecciones en 2016 y estaba convencido entonces -mes de febrero- que haría lo mismo en 2020.

Pero no se confundan. La guerra de Soros no está en las elecciones norteamericanas de noviembre sino en una institución mucho más importante y que se llama Iglesia católica.

En cuanto Zuckerberg se rindió a Soros, los grandes anunciantes mundiales llegaron a un acuerdo con Facebook. Ahora, Mark ya no permite ‘mensajes de odio’

Pero vamos a la noticia: Facebook, Youtube y Twitter han firmado la paz con los grandes anunciantes mundiales que retiraron su publicidad en verano (más de 1.000 firmas lo hicieron) para protestar por la inacción de la red social ante lo que ellos consideraron mensajes de odio -mensajes de Donald Trump, principalmente-, tras la muerte de George Floyd.

Aquello sucedió en julio y en agosto, Facebook anunció la creación de una junta de supervisión independiente -sí, no se rían- con capacidad para autorizar y eliminar contenido de Facebook y de Instagram. El caso es que 18 de los 20 miembros de ese nuevo organismo están vinculados, en mayor o menor medida, con asociaciones que han recibido fondos de la Open Society Foundations, de Soros. Ese mismo mes, varias compañías anunciaron su vuelta a la red social, al considerar que Zuckerber había rectificado su postura.

Relacionado

Y finalmente, este miércoles, el Financial Times publica que Facebook (propietaria de Instagram y de WhatsApp), Youtube y Twitter han llegado a un acuerdo con los grandes anunciantes mundiales para establecer qué mensajes deben ser eliminados de internet por considerarlos dañinos. Pornografía, consumo de drogas y blasfemias son tres de las 11 categorías que han establecido, de momento. Hay que vestir el acuerdo de la mejor manera posible.

En definitiva, Facebook, Youtube y Twitter han cedido al chantaje de Soros. Ahora ya no permitirán ‘mensajes de odio’.