Isabel Díaz Ayuso no se achanta ante Pablo Iglesias y su anuncio de dejar la vicepresidencia segunda del Gobierno para competir con la Comunidad de Madrid. “España me debe una, hemos sacado a Pablo Iglesias de La Moncloa”, ha presumido la presidenta de la Comunidad de Madrid, tras colgarse esa medalla política.

Un año después de poner en marcha el Plan Territorial de Protección Civil de la Comunidad de Madrid, en la rueda de prensa al hilo de este aniversario, el protagonismo se cedía a todo lo relacionado con las elecciones autonómicas del 4-M. Sin embargo, el motivo no era que el TSJM haya avalado la convocatoria electoral ni que la Asamblea de Madrid haya decidido no recurrir esa decisión, sino el sorprendente anuncio de Iglesias. Parece que al líder del partido morado le estaba molestando que se hablara tanto de Ciudadanos y quería atraer al foco mediático.

Pero Díaz Ayuso no se ha achantado ni lo más mínimo y ya ha anunciado que cambia su lema de campaña (que era “Socialismo o libertad”) a “Comunismo o libertad”. La política popular madrileña ha llamado a aglutinar esfuerzos en el centroderecha contra el comunismo, que ha arruinado mucho países. “El comunismo, el retroceso, el caos, la revolución, quemar las calles y que los poderes públicos lo instiguen; eso es lo que me preocupa, no Vox”, ha subrayado.

“El comunismo, el retroceso, el caos, la revolución, quemar las calles y que los poderes públicos lo instiguen; eso es lo que me preocupa, no Vox”, subraya Díaz Ayuso

Díaz Ayuso ha destacado que Iglesias “es una persona afín al entorno de ETA, a los independentistas, que ha estado actuando siempre contra la Comunidad de Madrid y los intereses de todos los ciudadanos”. Al hilo de esto, ha recordado que “ha fomentado y cree vivamente en la expropiación, en la ocupación, en la intervención de la empresa, en boicots o, por ejemplo, en ataques desmedidos contra el hospital Isabel Zendal, fomentando huelgas, y sobre todo, quemando las calles de Madrid, como hemos visto en las últimas semanas (en las protestas por la encarcelación de Hasél), que es el primero que lo ha alentado y jaleado”.

La presidenta de la Comunidad de Madrid no se ha olvidado de Ignacio Aguado y de su falta de lealtad: “esa relación se puede resumir en lo que ha hecho el presidente de la Asamblea, que es de su mismo partido, tratando de evitar que los madrileños fueran a las urnas, sembrando dudas sobre el proceso electoral”. Eso sí, ha señalado que eso “es agua pasada, estamos en otras circunstancias” y ha destacado que “la relación con muchas personas de Ciudadanos es buena” y “he tenido a buenos gestores de Ciudadanos en la Comunidad de Madrid”. Quiere una lista del PP y también “el gobierno de los mejores y unir en torno a nuestro proyecto”.