En primer lugar, como acto terrorista parece una chapuza de mucho cuidado. Tranquilos, es muy poco probable, por no decir imposible, que alguien pudiera resultar herido.

En segundo lugar, la reacción de los aludidos ha sido la esperada si alguien hubiese programado los hechos.

Y, por último, ¿qué pinta Soros en esta melé? Según RTVE, cada día más progre-tópica, es porque la ultraderecha odia a este millonario filántropo. ¡Vamos, anda! Aquí el único odiador es George Soros, un personaje especialmente cristófobo. Y, por cierto, es un millonario filántropo… sobre todo con el dinero de otros millonarios cristófobos que prefieren permanecer en el anonimato.

A ver si van a ser autobombas Nuevo Orden Mundial (NOM)… para echar al mutante Trump, un personaje curioso e imprevisto, que se les ha colado en el proscenio de la nueva escena mundial.

No, no puedo demostrarlo.