Contamos en Hispanidad que la ministra de Derechos Sociales, la pancartera Ione Belarra, quiere ilegalizar las empresas de desokupación porque son "gentuza " que "se lucra persiguiendo a los vulnerables"... es decir, al okupa. Y es que para la ministra "España no tiene un problema de ocupación". 

Ahora vamos con el drama de Yolanda que, al igual que Gustavo, tampoco es un invento de la ultraderecha, sino víctima de la inquiokupación. Okdiario ha hablado con esta madre de tres hijos que se ha visto abocada al pluriempleo para pagar la hipoteca de su okupa, que lleva sin abonar el alquiler cuatro años. 

Su apartamento de 52 metros cuadrados se encuentra en el barrio de Villaverde Bajo, en Madrid, lo compró en pesetas y se hipotecó hasta 2032. Nada que ver con la herencia de Irene ni con los grandes tenedores maliciosos que explotan a los vulnerables. 

Cuando Yolanda se convirtió en madre de familia numerosa tuvo que mudarse a un piso más amplio, por lo que decidió alquilar el apartamento, para lo que firmó un contrato con Ana, su inquilina, por el que ésta pagaba 520 euros. Pero Ana no quiere pagar, según detalla el medio: la inquiokupa primero puso excusas alegando que sus clientes del tarot no le pagaban, después la pandemia y ahora que le es imposible hacer frente al pago. Pero según ha podido comprobar Okdiario, Ana recibe el Ingreso Mínimo Vital, no es vulnerable y está en condiciones de trabajar. 

Ana lleva sin cotizar a la Seguridad Social 10 años, por lo que servicios sociales le ofreció una alternativa habitacional, pero la rechazó porque no podía mudarse con sus gatos: "Dice que son miembros de su familia, que si a mí me dan igual sus gatos a ella no le importan tampoco mis tres hijos". 

Según ha contado Yolanda al medio, Ana está recibiendo asesoramiento para seguir okupando por parte de políticos de Podemos y Más Madrid: "Nos están utilizando como escudo social". 

"Son delincuentes", sentencia Yolanda, que se ha visto obligada a tener tres empleos para poder pagar la hipoteca y los gastos de agua y comunidad del piso que disfruta su okupa.