La Policía llevaba dos años investigando el caso del hombre que apareció calcinado en Vallecas
Ocurrió hace dos años en Vallecas. Una vecina que se encontraba paseando por un pinar de Villa de Vallecas observó que se estaba generando un fuego en la zona. Avisó a emergencias y cuando los agentes acudieron al punto indicado hallaron, entre las llamas, el cadáver de un hombre.
Desde ese momento la Policía Nacional abrió una investigación que partió con una dificultad añadida: a la víctima le habían extraído las piezas dentales y los dedos para evitar que pudieran identificarlo. El trabajo de los agentes de la Policía Científica permitió conocer, más tarde, que se trataba de un marino mercante de profesión que solía permanecer varios meses fuera de España y recurría a personas de su entorno como destinatarias del ingreso de sus nóminas mensuales.
Cuando regresaba a España, estas personas le hacían entrega del dinero generado con su trabajo, hecho que en ocasiones no ocurría, convirtiéndose en víctima de continuos engaños.
En agosto del año 2021, la víctima llegó al aeropuerto de Madrid donde le esperaba una amiga, la cual se había convertido en los últimos años en la persona de confianza que recibía el ingreso de sus nóminas y se apropiaba constantemente de manera indebida de ese dinero.
Tras encontrarse, ambos se desplazaron a la localidad de Torrejón de Ardoz donde la presunta autora de los hechos tenía un local alquilado y es en ese momento cuando se perdió la pista de la víctima.
Según El Debate, los agentes de homicidios pudieron corroborar que fue en ese local donde se consumó el homicidio y que posteriormente la presunta autora solicitó a un conocido, mediante engaño, la utilización de su vehículo particular para, con el pretexto de realizar una mudanza, trasladar el cuerpo sin vida días después.
Hizo creer a su entorno que continuaba con vida en días posteriores, la autora cubrió el cadáver y lo trasladó en el vehículo hasta el pinar ubicado en la calle Cerro del Murmullo donde lo quemó.
Además, la responsable hizo creer a los allegados del fallecido que su desaparición había sido voluntaria y que seguía con vida.
Tras numerosas gestiones, los agentes detuvieron a esta mujer la cual fue puesta a disposición de la autoridad judicial quien decretó su ingreso en prisión.