The Walt Disney Company no frena en la “corrupción de menores”, como refiere el líder de Vox, Santiago Abascal, el hecho de que los contenidos hayan dejado de ser tan inocentes como deberían al dirigirse a los niños y se han convertido en adoctrinamiento, en concreto, de los postulados del Nuevo Orden Mundial (NOM): esto se traduce en una gran apuesta por la ideología de género (feminismo y homosexualismo) y por el ateísmo (mucho panteísmo y nada de Dios). La última muestra se ve en que pese a críticas y boicot por el beso lésbico en Lightyear, insiste en la agenda LGTBI, jugándose mucho dinero, y considera ese gesto como “una actualización de la familia”.

Así lo dice la argentina Victoria Alonso, presidenta de producción de Marvel (estudio que es propiedad de Disney desde el 31 de diciembre de 2019), en una entrevista en El País, así como la intención de continuar por dicha senda. “En EEUU ese beso es una actualización de la familia, y lo vamos a seguir mostrando. Ojalá que el mundo lo acepte”, subraya. Conviene recordar que hace unos meses, la directora general de contenido de entretenimiento de Disney, Karey Burke, anunció que “a finales de 2022, aproximadamente, la mitad de los personajes de nuestras películas de animación serán LGTBQ+ y pertenecientes a minorías étnicas”.

Hace unos meses, la directora general de contenido de entretenimiento de Disney, Karey Burke, anunció que “a finales de 2022, aproximadamente, la mitad de los personajes de nuestras películas de animación serán LGTBQ+ y pertenecientes a minorías étnicas”

Las declaraciones de Victoria Alonso no son baladí, pues se conocen después de que Lightyear se haya prohibido en 14 países musulmanes y en China, y también ha surgido rechazo en Ecuador y en Guatemala, pero sin llegar al veto total. La asociación Familia Ecuador rechazó la proyección en cines al considerarla un “ataque ideológico”, en un comunicado enviado al Instituto de Fomento a la Creatividad y la Innovación (ICCA) y al Ministerio de Cultura y Patrimonio, como informa Aciprensa. También criticó “la excesiva permisividad del país al proyectar producciones cinematográficas con contenido no apto para la madurez emocional y psicológica de nuestros hijos, donde se distorsiona la figura de la familia”, recordando que el Código de la Niñez y Adolescencia del país recoge que “se consideran inadecuados para el desarrollo de los niños, niñas y adolescentes los textos, imágenes, mensajes y programas que inciten a la violencia, exploten el miedo o aprovechen la falta de madurez de los niños, niñas y adolescentes para inducirlos a comportamientos perjudiciales o peligrosos para su salud y seguridad personal y todo cuanto atente a la moral o el pudor”. En sus redes sociales, Martha Villafuerte, presidenta de Familia Ecuador, ha cuestionado: “¿Estamos de acuerdo en que no estamos de acuerdo con el nivel de adoctrinamiento agresivo y saturado en las películas infantiles últimamente? El miedo a manifestarlo para no ser atacado de ‘homofóbico’ es indignante”. 

Mientras, en Guatemala, una sala de cine alertó al público sobre el contenido de Lightyear de esta forma: “Advertencia: contiene escenas con ideología de género”, como también informa Aciprensa. Además, a finales de marzo, la asociación italiana Provita & Famiglia (Provida y Familia) articuló una protesta titulada ‘No más propaganda LGBT en los dibujos animados de Disney’ recogiendo firmas (ya lleva casi 41.000), donde señaló que “Walt Disney continúa usando sus productos para promover la ideología de género y LGBT frente a los niños de todo el mundo”, denunciando que “bajo la presión de los poderosos grupos de presión gay y transgénero de EEUU, Disney incorporó un beso gay explícito” e invitó a boicotear Lightyear tanto en los cines como en la plataforma de streaming Disney+ (considerando incluso la opción de cancelar la suscripción). 

Martha Villafuerte, presidenta de Familia Ecuador, cuestionado: “¿Estamos de acuerdo en que no estamos de acuerdo con el nivel de adoctrinamiento agresivo y saturado en las películas infantiles últimamente? El miedo a manifestarlo para no ser atacado de ‘homofóbico’ es indignante”

Paralelamente, en Aciprensa, dos sacerdotes han respondido al actor Chris Evans, que da voz al protagonista de la película, Buzz Lightyear, y le parece “un honor formar parte del cambio que supone la inclusión social del colectivo LGTBIQ” y llamó idiotas a quienes rechazaron el beso lésbico. El colombiano fray Nelson Medina, sacerdote dominico y doctor en Teología Fundamental, subrayó que “estamos asistiendo a la imposición de una serie de dogmas que no admiten disenso, sopena de ser ridiculizado con expresiones como las que ha utilizado Evans, al tratar de idiotas o dinosaurios a los que no estén de acuerdo con las ideas de sexualidad y de afectividad que ellos promueven y de las que esperan recibir abundante dinero”, y que “asistimos también a un episodio más de una masiva campaña, ya global, que pretende limitar progresiva e irreversiblemente los derechos de los padres a tomar las decisiones que les pertenecen por justicia natural sobre la educación de sus hijos”. Por su parte, el español Francisco Javier “Patxi” Bronchalo, sacerdote de la Diócesis española de Getafe, señaló que “en este caso se utiliza el cine y más el cine infantil para meter una determinada cosmovisión y antropología y se utiliza una película que muchos van a querer a ver, porque es de la saga de Toy Story, que fue la primera película 3D”, recordando que “las familias tienen que educar y enseñar qué contenidos tienen una teología adecuada, una adecuada visión del mundo, del hombre y la mujer”.

Y por cierto, aludiendo a que Disney se ha entregado a la propaganda LGBTIQ+, pero también lo hacen otras plataformas y canales de televisión, pueden ver este vídeo publicado en Religión en Libertad con la explicación de Pablo Muñoz Iturrieta, doctor en Filosofía Política y Jurídica, con una maestría en Psicología Filosófica y estudios en filosofía, teología y humanidades.