La Creación, de Miguel Ángel
Tiene su interés, esto que me envían. Es el Padrenuestro en arameo, junto al hebreo, la lengua que habló el Hijo de Dios en su paso por la tierra.
Tiene su interés porque recalca la divinidad de Cristo, por el contenido, tanto como su humanidad y nada identifica más al hombre que el lenguaje, lo que le distingue de los animales.
Escuchar el Padrenuestro en lengua aramea es superar las dos herejías que compendian todas las herejías de la historia, por cierto, herejías de signo opuesto. A saber:
- La de las actrices idiotas que sueltan aquello de que Jesucristo fue un hombre admirable pero tanto como Dios…
- La de los filósofos idiotas que se van al otro exremo e idolatran a un dios lejano
Sólo hay dos tipos de herejías: las que adoran al hombre cercano, y las que idolatran a un dios lejano, creador y poderoso pero no padre amantísimo.
Contra ambas, resulta un buen remedio escuchar el Padrenuestro en arameo y rezarlo en español.
Escuchen el Padrenuestro en arameo: suena como una sinfonía.