Me lo cuentan en Sanidad. Lo del estudio, debate y reflexión sobre una tercera dosis de Pfizer, hasta ahora sólo en viejecitos, no ha hecho más que empezar. Porque el Gobierno sospecha, sólo sospecha, que conste, que se va a ver obligado a imponer una tercera dosis de Pfizer, como refuerzo y todo eso. 

La ministra de Sanidad, Carolina Darias, aún no se ha psicoanalizado a sí misma pero, tras un democrático debate interno, ha decidido que sí, que todos debemos vacunarnos una tercera vez. Naturalmente puedes negarte pero entonces te haremos la vida imposible, para que puedas elegir con plena libertad entre vacunarte y vacunarte.

Además, según un miembro del mismo Ejecutivo, nunca mejor que ahora, cuando, en breve, comenzará la vacunación de la gripe y podremos matar dos pájaros de un tiro. Todo vale para que valga todo.

Pero no hemos terminado con lo bueno y jocoso. Sanidad, que organismo si no, quiere investigar a los que no se han vacunado para saber si lo hacen por negacionismo o por hipocondría. Es decir, quiere saber si los rebeldes son estúpidos negacionistas o aprensivos estúpidos.

Ya he dicho que los negacionistas no existen, o son cuatro gatos, porque a quienes se tilda como negacionistas no son, al menos en su mayoría, los que no creen que exista el virus sino quienes se rebelan contra quienes aprovechan el virus para conculcar nuestra libertad, para someternos o simplemente para mentirnos. 

Y lo de aprensivos… hombre, se supone que los hipocondriacos son aquellos que suspiran por ponerse la vacuna para salvarse del virus, no quienes desprecian la vacuna con olímpico desinterés. Esos parecen poco aprensivos.

Suecia ha suspendido el uso de la vacuna Moderna para menores de 30 años. Fue el primer país que no se dejó engañar por el presunto fracaso de nuestro sistema inmunológico

Sanidad sigue así la línea del cara, yo gano; cruz, tú pierdes. No falla. 

Suecia ha suspendido el uso de la vacuna Moderna para menores de 30 años. Fue el primer país que no se dejó engañar por el presunto fracaso de nuestro sistema inmunológico. 

¿Recuerdan? Cuando la primera ola del coronavirus, la letal, Suecia fue el país europeo que se negó al confinamiento y defendió la inmunización natural. No cerró el país y así sufrió un revés económico menos severo y, además, sufrió menos muertos por Covid que España. 

Pero en Suecia no te llaman negacionista por prevenir los posibles efectos secundarios de Moderna o simplemente por hacer preguntas. Simplemente, los suecos tienen menos prejuicios que los españoles.