El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont anunció ayer que descarta aspirar a la presidencia de la Generalitat y designó a Quim Torra, diputado de Junts pel Cat y expresidente de Òmnium Cultural, como candidato para la investidura. El Gobierno recordó tras conocer la designación de Torra que el candidato a la presidencia de la Generalitat "tiene la obligación de respetar la ley" y "estar en condición de cumplir con sus responsabilidades" como presidente. Todos los diarios resaltan el perfil "radical" de Quim Torra, al que consideran un "títere" de Puigdemont.

Además, el Tribunal Supremo (TS) se ha dirigido al Tribunal Superior de Schleswig-Holstein con una documentación complementaria de la euroorden dictada contra Carles Puigdemont, en la que propone a los jueces alemanes que entreguen al expresidente de la Generalitat por el delito de sedición. El escrito -al que La Vanguardia y la COPE han tenido ­acceso- presenta esta opción como posible calificación alternativa si la justicia germana considera que no se dan los requisitos para entregar al reclamado por un delito de ­rebelión. El juez encargado del caso 1-O en el Supremo, Pablo Llarena, razona que esta segunda acusación, la de rebelión, debe ser examinada como la principal, porque tiene todo fundamento. Pero admite la posibilidad de que los hechos se interpreten como un delito de sedición.