El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha demostrado que es digno sucesor del anterior titutal de su ministerio, Miquel Iceta. El socialista catalán emprendió un procedimiento para comprobar el contenido de los museos estatales, ahora Urtasun va a extenderlo. 

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Así, ha anunciado que establecerá un "proceso de revisión" de museos estatales para "visibilizar y reconocer la perspectiva de las comunidades y la memoria de los pueblos de los que proceden los bienes expuestos" y que ayude a "superar un marco colonial anclado en inercias de género o etnocéntricas que han lastrado en muchas ocasiones la visión del patrimonio, de la historia y del legado artístico".

"España ha heredado esa cultura colonial que, de alguna manera, tenemos que ver y gestionar", aseguraba el ministro.

Para lograr sus objetivos al mando de cultura, ha fijado la creación de "espacios de diálogo e intercambio", así podrá acabar con los problemas en los museos que han "lastrado" "la visión del patrimonio, de la historia y del legado artístico". 

Urtasun promete luchar contra la "censura", y es que, en su opinión, "la creación y producción cultural sufre un momento histórico de cambio en el que la censura y la injerencia política ganan terreno en la gestión cultural pública". Por eso creará un nuevo organismo: "Esta Dirección acompañará a cualquier creador, autor o colectivo cuya actividad haya sido borrada o censurada del espacio público".

Por su parte, Borja Sémper pidió a Urtasun que no se convierta en un activista: "Un ministro de Cultura no debe ser un burócrata ideologizado".

Sobre las inercias de género, Sémper cuestionó la política de Igualdad en este Ministerio y exigió al Gobierno “que sea coherente con sus discursos y prediquen con el ejemplo”. El vicesecretario de Cultura y portavoz del PP enumeró a Urtasun las instituciones culturales públicas donde los socialistas tienen en altos cargos de mando a hombres. 

Además, preguntó al titular de Cultura si es censura o no echar a un clarinetista por carecer del C1 de catalán; si lo es que Podemos y Bildu revisaran las letras de CTangana en Bilbao; o Ada Colau con un cartel de Morante de la Puebla en Barcelona, o un Congreso de Plurilingüismo, entre otros casos.

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Urtasun quiere mostrar su "postura firme contra cualquier forma de censura" durante su legislatura. Para entendernos, un comunista va a revisar los museos, al tiempo que luchará contra la censura. Podemos echarnos a temblar.