Como recogió Hispanidad, el 7 de enero de este año, en vísperas de la fraudulenta ceremonia de toma de posesión de la Presidencia de Venezuela del pasado 10 de enero, el dictador Nicolás Maduro secuestró a Rafael Tudares, yerno del opositor Edmundo González (quien venció en las elecciones del pasado 28 de julio, como quedó acreditación esta web y que se encuentra exiliado en Madrid). 

Poco después del secuestro, su mujer Mariana González denunciaba que no sabía nada de su marido, ni dónde ni cómo se encontraba: "Pido y ruego a Dios todos los días por la libertad, por razones humanitarias, de Rafael".  

Pues bien: Mariana González ha informado de que su marido va a ser juzgado por las autoridades chavistas quienes le acusan de seis graves delitos, entre los que se incluyen «forjamiento de documentos, conspiración, terrorismo, asociación ilícita, legitimación de capitales y financiamiento al terrorismo».

González añadió que su esposo «es una víctima atrapada en este conflicto político, un ciudadano inocente sometido a un proceso injusto únicamente por sus vínculos familiares».  

Y es que con esa crueldad se las gasta la dictadura chavista, al mas puro estilo estalinista: si no puedo actuar contra alguien directamente, le ataco o le someto a chantaje actuando contra sus parientes.