"Sorpresa y pesar" por parte de la Santa Sede al conocer la noticia de la "ceremonia de investidura", que tuvo lugar el 24 de noviembre, en Nanchang, de monseñor John Peng Weizhao, obispo de Yujiang (provincia de Jiangxi), como "obispo auxiliar de Jiangxi", diócesis no reconocida por la Santa Sede, informa Vatican News.

"Tal evento, de hecho, no tuvo lugar de acuerdo con el espíritu de diálogo existente entre el Vaticano y las partes chinas y con lo estipulado en el Acuerdo Provisional sobre el Nombramiento de Obispos, el 22 de septiembre de 2018", se lee en un comunicado de la Santa Sede publicado el sábado 26 de noviembre. "Es más, el reconocimiento civil de Monseñor Peng habría estado precedido de una larga y fuerte presión por parte de las autoridades locales", continúa la nota.

"La Santa Sede espera que no se repitan episodios similares, aguarda las comunicaciones oportunas sobre el asunto por parte de las Autoridades y reafirma su plena disposición a continuar el diálogo respetuoso sobre todos los asuntos de interés común”, añade Vatican News.

El Acuerdo Provisional fue firmado por los representantes de la Santa Sede y de la República Popular China el 22 de septiembre de 2018. El acuerdo preveía un período de aplicación ad experimentum de dos años. En octubre de 2020, la validez del acuerdo se prorrogó otros dos años. El 22 de octubre de este año 2022 se renovó el Acuerdo.

Tal evento, de hecho, no tuvo lugar de acuerdo con el espíritu de diálogo existente entre el Vaticano y las partes chinas y con lo estipulado en el Acuerdo Provisional sobre el Nombramiento de Obispos, el 22 de septiembre de 2018

En un viaje reciente a Kazajistán, en septiembre pasado, el Papa Francisco señaló sobre las relaciones con China: “Entender a China lleva un siglo. Y no vivimos un siglo. La mentalidad china es rica. Y cuando se enferma un poco, pierde su riqueza y es capaz de cometer errores. Para entender, nosotros hemos elegido el camino del diálogo, abiertos al diálogo.

Hay una comisión bilateral Vaticano-China que va bien. Lento porque el ritmo chino es lento. Tienen una eternidad para seguir adelante. Es un pueblo de una paciencia infinita, pero de las experiencias que tuvimos antes, pensamos en los misioneros italianos que fueron allí y fueron respetados como científicos, también pensamos hoy, en muchos sacerdotes o personas creyentes que han sido llamados a las universidades chinas porque valoran la cultura.

No es fácil entender la mentalidad china, pero hay que respetarla. Yo siempre respeto. Y aquí en el Vaticano hay una comisión de diálogo que va bien, está presidida por el Cardenal Parolin y es en este momento el hombre que más sabe de China y del diálogo con los chinos.

Es algo lento, pero siempre se están dando pasos hacia adelante. Calificar a China de democracia o antidemocracia no me parece porque es un país muy complejo y con sus ritmos. Sí, es cierto que hay cosas que nos parecen antidemocráticas. Es cierto. El Cardenal Zen es un hombre mayor que tiene el juicio en estos días. ¿Creo, no?

Y dice lo que siente. Se ve que hay limitaciones. Más que calificar, porque es difícil, no me siento capaz de calificar. Estas son impresiones. Más que calificar, intento apoyar la vía del diálogo. En el camino del diálogo se aclaran muchas cosas.

Y no solo en la iglesia sino de otros ámbitos, pero por ejemplo la extensión de China, los gobernadores de las provincias son todos diferentes, incluso hay diferentes culturas dentro de China... es un gigante.

Entender a China es algo gigantesco pero no perder la paciencia, cuesta, cuesta mucho. Pero tenemos que avanzar con el diálogo. Intento abstenerme de calificarla, porque puede darse pero sigamos adelante".

Por su parte, el cardenal Joseph Zen ha sido un abierto crítico del acuerdo del Vaticano con China. En marzo de 2020, el también obispo Emérito de Hong Kong acusó desde su blog al secretario de Estado del Vaticano, cardenal Parolin, de manipular al Papa Francisco y criticó el enfoque de la Santa Sede sobre la Iglesia Católica en China.