
Acuérdense de aquella 'Grossem Coalition' entre la derecha y la izquierda alemanas, entre democristianos y socialistas, nombres que ya poco significan pero algo dicen. La 'Grossem Coalition' termina ahora en la 'Grossem Chorradem', cuando el nuevo canciller Friedrich Mezt ha pactado con los verdes que van a dedicar 400.000 millones a rearmarse ante Rusia y otros 100.000 a la sostenibilidad del planeta.
Alemania vuelve a marcar el camino a toda Europa, con paso firme y decidido: directos al precipicio.
Entendamos el sentido del pacto: eliminemos al hombre pero salvemos al planeta. Ninguna broma, porque es lo que piensan muchos habitantes de una Europa decrépita, la misma Europa donde los perros superan a los niños.
¿Y toda Europa seguirá en ese línea? Algunos no. Por ejemplo, el muy original presidente del Gobierno español. Lo de Sánchez es triple salto mortal sin red, sólo que él aparece en la pista vestido como trapecista y, al final, nos invita a todos a ejecutar el número y el riesgo, mientras él coordina y vigila.
Sánchez, en su línea: asegura que va a ampliar el gasto militar... pero en protección civil y en la lucha contra el cambio climático. Y promete que no se resentirá el gasto social: es decir, más impuestos
Porque Sánchez nos dice que aumentará el gasto militar. Mentira: Europa le pide el 3% ya y él prepara el 2% para 2030. Eso no es aumentar, es mantener.
También nos dice que ese aumento en gasto militar no sólo será en armamento, sino en protección civil -no es coña- y en la lucha contra el cambio climático. Aquí, sí, igualito que los alemanes. Sólo que Merz no considera estúpidos a los germanos y segrega entre gasto en armas y gasto en sostenibilidad, en porcentajes del 80 y el 20%.
Nuevo embuste porque sí, es más gasto en armamento pesado. De hecho, por eso Indra sube en Bolsa.
Más mentiras de Sánchez: aumentaré el gasto militar sin tocar el gasto social. Pues eso, mi querido amigo, sólo se consigue subiendo impuestos y endeudando más a los españoles.
No, replican en Moncloa, no endeudamos a los españoles se endeudará Europa en su conjunto. Claro, y lo pagaremos a escote como pagamos todos los gastos europeos. Es decir, más impuestos y más deuda.
Al final, como los europeos no están dispuestos a que Sánchez vuelva a tomarles el pelo, harán dos cosas: no mutualizar la deuda salvo en mínima parte, tal y como pretende Moncloa y relegar a España al furgón de cola en la nueva Europa del bazar de la armas.
Y a todo esto, ¿el rearme Europeo es bueno? Un rearme nunca es bueno, aún cuando, en ocasiones, pueda resultar necesario. Lo aconsejable es siempre la paz. Ahora bien, si esta no fuera posible, y recuerden que no hay paz sin justicia ni justicia sin perdón, es mejor optar por reinstaurar la conscripción, el servicio militar obligatorio, para que el europeo, y el español, sea conscientes de que el primer responsable de defender a su país, que tanto le ha dado, es él mismo.
¿Y si en lugar de fabricar armas reinstauramos la mili? ¿Acaso es la mejor forma de enfrentarse a las 4.400 ojivas nucleares rusas? Sin duda
No sea ridículo: la mili no detendrá a Putin. ¿Acaso es la mejor forma de enfrentarse a las 4.400 ojivas nucleares rusas? Sin duda. Primero porque las casi 2.000 ojivas nucleares rusas ya desplegadas no son detenibles con ningún armamento, tampoco con otras cabezas nucleares. Putin no las ha empleado en Ucrania: sabe que sólo sirven para amedrentar al enemigo no para atacar porque, empleadas como armas de ataque, sólo pueden provocar la solución final, la destrucción total. Rusia ha invadido Ucrania con armas 'convencionales' -entendiendo por ello, no nucleares- y los ucranianos se han defendido con armas 'convencionales', ante el mayor ejército nuclear del mundo.
Pero Sánchez sabe que si decreta la vuelta al Servicio militar obligatorio conculcaría todo su estúpido credo progresista, al tiempo que no conseguiría ni el menor apoyo de sus socios. Recuerden que se sienta en Moncloa gracias a los orcos de Mordor.
En cualquier caso el nuevo invento alemán que regirá Europa ya lo conocen: eliminemos al hombre pero salvemos la planeta. Muy edificante. Y a los verdes les gusta. Les gustan los 100.000 millones de euros del Presupuesto alemán, cantidad que les permitirá seguir viviendo de la subvenciones pública al menos por otros 25 años. Y el buen ecologista vive de eso: de las subvenciones públicas... pagadas con el dinero de los demás.