Hoy se ha entregado en Oslo el premio Nobel de la Paz a la opositora venezolana María Corina Machado, con la incógnita de si se desplazaría ella misma a recogerlo, pues se encuentra escondida en su país debido a la persecución que sufre por parte de la dictadura chavista de Nicolás Maduro.

Pues bien: el Instituto Nobel -el que otorga los premios- ha anunciado que María Corina Machado estará en Oslo, aunque no llega a la ceremonia para recoger el premio, algo que ha hecho en su honor su propia hija. 

En un comunicado, la institución apuntaba: "La premio Nobel de la Paz, María Corina Machado, ha hecho todo lo posible para asistir hoy a la ceremonia. Un viaje en una situación de extremo peligro. Aunque no podrá asistir a la ceremonia ni a los eventos de hoy, estamos profundamente felices de confirmar que está a salvo y que estará con nosotros en Oslo".

El Instituto Nobel ha divulgado en la red social X una llamada telefónica con ella antes de viajar a Oslo: “Tan pronto llegue podré abrazar a toda mi familia y a mis hijos que no veo desde hace dos años y a tantos venezolanos-noruegos que conozco que comparten nuestra lucha”.

Varios mandatarios internacionales han querido desplazarse a Oslo para mostrarle su apoyo, que al fin y al cabo equivale a defender la libertad para Venezuela. Algunos de ellos son el presidente argentino Javier Milei, su homólogo ecuatoriano, Daniel Noboa y el de Paraguay, Santiago Peña. 

Otro que ha viajado hasta allí es el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, quien señaló a su llegada a la capital noruega: «Venezuela será un gran hito histórico de cómo un pueblo con resistencia, pero tenacidad y lucha, se libera de un dictador tirano (en referencia a Nicolás Maduro)». «Aquí sólo hay una ruta, la libertad y la democracia de Venezuela».

El presidente interino de Perú, José Jerí, no se ha desplazado para asistir a la ceremonia, pero ha mandado a la galardonada una felicitación: «En nombre del Gobierno y pueblo de Perú y en mío propio deseo expresarle nuestras más sinceras felicitaciones por haber sido distinguida con el Premio Nobel de la Paz 2025, galardón que honra su firme compromiso con la defensa de la democracia de los derechos humanos y las libertades fundamentales en la República Bolivariana de Venezuela». «Su ejemplo constituye una fuente de inspiración para todos aquellos que creen en el poder del diálogo, la Justicia y la voluntad popular como pilares de una convivencia pacífica y de un futuro democrático en nuestra región».