
Es evidente el giro provida que ha sufrido Estados Unidos desde que Donald Trump ocupa la Casa Blanca. Medidas provida, excarcelamiento de activistas acosados por Joe Biden y declaraciones y posicionamientos de primeros espadas de la Administración a favor de la vida.
También evidente es el 'cierre de grifo' que la Administración Trump-Vance están llevando en todos los sectores a la vista del derroche de fondos por parte del anterior Gobierno.
Y si juntamos ambas ideas tenemos como resultado una gran noticia: la Administración Trump anunció la congelación de las subvenciones a Planned Parenthood, el gigante abortero que no pasa por su mejor momento: dinero derrochado en financiar objetivos políticos y candidatos aborteros, sumado a las numerosas denuncias por fraude que acumula la red de abortorios, el cierre obligado de muchas clínicas gracias a las medidas provida y el corte de financiación de Medicaid con la llegada de Trump, suponen un panorama económico que se presenta muy negro para Planned Parenthood.
Y hoy ha llegado la estocada final, el Tribunal Supremo emitió un fallo con el que permite a los estados quitar la financiación del plan público Medicaid a Planned Parenthood. Con una mayoría de seis votos a favor y tres en contra.
Todo surge por el intento del gigante abortero de demandar a Carolina del Sur por retirarle los fondos públicos, el Alto Tribunal sin embargo, le ha dado la razón al Estado, permitiendo la retirada de dinero público, algo que sienta el precedente para que el resto de Estados Republicanos hagan lo mismo.
El gobernador republicano argumentó que esos pagos equivalían a un subsidio del contribuyente para el aborto y su estado prohíbe el aborto a partir de las seis semanas de embarazo.