Pedro Sánchez, ególatra y narcisista, capaz de todo con tal de mantenerse en Moncloa, necesita los votos de ERC para acabar la legislatura, para lo que tiene que saldar sus deudas y promesas con los independentistas. Y como para Sánchez todo vale ha llegado a un acuerdo para modificar sedición y malversación, tras lo que los independentista exigen referéndum de autodeterminación y aseguran que si se gana habrá una negociación con el Gobierno del Estado: ¿comprenden? 

El acuerdo entre PSOE y ERC rebaja de ocho a cuatro años la pena máxima de prisión cuando no exista ánimo de lucro o enriquecimiento personal y está previsto que se apruebe antes de que acabe el año. Para darle un toque moderado, PSOE y Unidas Podemos, han presentado una propuesta en el Congreso para que el Código Penal añada un tipo de malversación que penalice con hasta 4 años de cárcel y 6 de inhabilitación el desvío presupuestario irregular dentro de la misma administración pública, lo que permitiría rebajar en dos años las penas con el actual Código Penal, y es que la propuesta de ERC habla de penas de seis meses a tres años. 

Una vez más, estamos ante la hipoccresía de la izquierda, en concreto de Podemos, recuerden que a finales de marzo se aprobó la toma en consideración de una proposición de ley del Partido Popular, Ciudadanos, Foro Asturias, UPN y Coalición Canaria, en la que se proponía la ampliación de la Prisión Permanente Revisable en el Código Penal. El objetivo era castigar con la prisión permanente revisable a los asesinos que oculten el cadáver, así como a los reincidentes.

Podemos votaba en contra, en rueda de prensa, el portavoz de la formación morada, Pablo Echenique, afirmaba que tenían en duda el voto porque veían una contradicción: “Un debate muy hipócrita por parte de las derechas, porque si las derechas pensaran que hay que aumentar las penas para que se cometan menos delitos en España, también plantearían aumentar las penas a los delitos de corrupción, de malversación de caudales públicos, de alzamiento de bienes y, sin embargo, nunca lo hacen”.

Pablo comparaba quitar la vida con quitar dinero, pero ahora parece haber olvidado su discurso y muestra su apoyo a los independentistas, depués de autoabanderarse azote de la corrupción.