En TVE, la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha trasladado este jueves que el posible regreso a España del Rey emérito, Juan Carlos I, después de que la Fiscalía archivara todas las investigaciones sobre sus actividades es una "decisión privada" que corresponde tanto al monarca como al actual Rey Felipe VI, pero ha insistido en que “debe dar explicaciones”.

Ha señalado que son hechos que al Ejecutivo no le gustan --"como no le gustan a la mayoría de los españoles"-- y ha insistido en que requerirían una explicación de Juan Carlos I, tal como ya señaló en su día el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

"Hay que respetar la decisión de la Fiscalía, ha trabajado con autonomía, ha concluido sus investigaciones y ahora queda la decisión del Rey emérito y de la actual Casa Real", respecto al regreso o no a España.

En esta misma línea ha apuntado que es la Casa Real quien debe posicionarse sobre esta decisión y el Gobierno no va a hacerlo porque queda en el ámbito "privado" de los monarcas.

Además, ha apuntado que las relaciones del Ejecutivo son con Felipe VI con quien mantienen una "magnífica relación".

Pero, como ha explicado Hispanidad, con el archivo de todas las causas judiciales de Juan Carlos I, vuelve el 'moderado' estadista Sánchez. Moncloa da por terminado el ataque a la Monarquía pero Felipe VI ya está advertido de lo que le ocurrirá si pretende ejercer como jefe del Estado...

En defintiva, Sánchez quiere un Rey bajo sospecha, Juan Carlos I, y un rey secuestrado, su hijo Felipe VI.