El pobre Pedro Sánchez, prisionero de los separatistas catalanes, es digno de lástima. A veces parece patético pero no: debemos considerar los esfuerzos que el pobre hombre hace para mantenerse en Moncloa.

Por ejemplo, está obligado a mentir de continuo e incluso a aceptar como suyas las mentira de los demás. La última: según él, una financiación singular para Cataluña es compatible con una financiación multilateral con el resto de autonomías... ¡¿Mande?¡ Es decir, que la suma a uno no tienes que restársela a los 14 restantes. Sí, 14 porque Navarra y Vascongadas ya lo tienen 'sumado'. En cualquier caso, don Pedro: esto es un juego de suma cero: lo que alguien gana -Cataluña- alguien lo pierde -el resto-.

Patético Sánchez: suplica a ERC que apoye al PSOE, es decir, que le mantenga en la poltrona... mientras Marta Rovira le desprecia desde Suiza

Para complementar, llega Salvador Illa, al que siempre le he tenido por un moderado pero no por un mentiroso. Asegura el ministro Covid que los catalanes "somos la tercera (comunidad autónoma) que más aporta y la decimocuarta que más recibe".

¡Falso, como todas las balanzas fiscales!. No son las autonomías las que aportan sino los habitantes de cada población de España, la caja común... y a eso siempre le hemos llamado solidaridad, que no robo. Los catalanes son más ricos que la media, ergo aportan más, Los canarios son más pobres que la media, ergo reciben más.

A todo esto, ¿por qué 48 millones de españoles tienen que depender de 8 millones de catalanes?

De todas formas si un catalán le dice que ellos aportan más, respóndale que es mentira, Los que más aportan y menos reciben de toda España son los madrileños y también aportan más todos los vecinos de comunidades de riqueza media más elevada que los catalanes. Por ejemplo, la provincia de Alicante o la comunidad autónoma de Baleares, o la Comunidad Autónoma madrileña. De la misma manera que, si no fuera por el privilegio foral, Navarra y Euskadi también aportarían más que Cataluña, porque son más ricas. Pero la que más aporta de todas es la odiada comunidad madrileña.

Dicho todo lo anterior, que sólo sirve para el debate público pero que aporta poco, el trasfondo resulta mucho más patético: las palabras de Sánchez no son sino una una súplica a ERC para que que apoye al PSOE, es decir, para que le mantenga en la poltrona monclovita... mientras la nueva líder Marta Rovira, le desprecia desde Suiza.   

En cualquier caso, ¿por qué 48 millones de españoles tienen que depender de 8 millones de catalanes? ¿Sólo para mantener a Pedro Sánchez en La Moncloa?

¿Qué solucionará el problema catalán? El tiempo, sencillamente... y la mano tendida hacia la convivencia sin privilegios. Cataluña es presa de una generación descristianizada que ha convertido la independencia en su credo religioso. Y eso sólo se arregla con un arrepentimiento y vuelta atrás, no cambiando la doctrina

España no roba a Cataluña pero si el presidente del Gobierno de España corrobora, con falsedad interesada, esa mentira, conseguirá, no la convivencia, ni la concordia, ni el perdón, sino todo lo contrario: conseguirá la España rota, la misma que, junto a la España roja, nos llevó a la guerra civil de 1936.

Y desengáñese todo aquel que piense que una financiación especial para Cataluña iba a solucionar el problema catalán: los separatistas han convertido la independencia en un credo. Si consiguen un estatuto fiscal especial, que, por cierto, sería tan injusto como lo es el régimen foral navarro o el cupo vasco, pedirán, no ya el referéndum de autodeterminación sino, sencillamente, la independencia.

¿Qué solucionará el problema catalán? El tiempo, sencillamente... y la mano tendida hacia la convivencia sin privilegios. Porque lo que reclama ERC y Junts no es otra cosa que privilegios. Cataluña es presa de una generación descristianizada que ha convertido la independencia en un credo religioso. Y eso sólo se arregla con un arrepentimiento y vuelta atrás, no cambiando la doctrina.