Consejo de Ministros del martes 8 de marzo. Isabel Rodríguez, doña frases redondas advierte, para romper el hielo: "El Gobierno está donde tiene que estar y hace lo que tiene que hacer". No hace falta decir más.

Sale acompañada de la vicepresidente Teresa Ribera y de la ministra Irene Montero, cada día más grosera con los periodistas. Las tres uniformadas con bozal morado. 

Una noticia por ministra pero la única concreta es la expresada por la precitada Isabel Rodríguez, con la aplicación de la contante y sonante Directiva Europea de Protección Temporal. Todo un mecanismo excepcional para los refugiados ucranianos. Otro canto de Rodríguez es para la unidad de los europeos en favor de Ucrania, lo que supone "la mejor arma contra Putin".

En plena pandemia energética Teresa Ribera, presenta el PERTE ddl reciclaje y la economía circular. Lo que no sabemos aún es en qué va a consistir

Pues bien, toda esta palabrería se concreta en que España acogerá a 12.000 ucranianos, contando los ilegales que estén ya en nuestro país (así no hay que pagarles billete de avión). De vergüenza, de mucha vergüenza.

Sobre todo, porque los polacos, esos seres tan poco democráticos, homófobos y xenófobos, sancionados por Bruselas y criticadísimos por el Gobierno español, cavernícolas lamentables... ya han acogido a 900.000 ucranianos. Sin necesidad de "hub" como dice la hortera de doña Isabel. Polonia, un país de 38 millones de habitantes frente a los 47 de España, un país más pobre que nosotros cuya gente ha acogido a sus vecinos huidos del horror y cuyo Gobierno, cuasi fascista, ha decidido otorgar una paga a aquellos que acojan refugiados en su casa.

Insisto 90.000 frente a 12.000. Y es que España, como repite Sánchez, otro maestro de las tautologías mentirosas "hará que lo tenga que hacer".

Día Internacional de la Mujer. Aparece Irene Montero, más grosera y maleducada que nunca, que se niega con malos modos a responder a las pregunta de los  periodistas. Entonces, ¿para qué da una rueda de prensa?

Su plan feminista consiste en gastarse 21.000 millones de los impuestos, más del 90% de los cuales irán a parar a subvenciones para sus amigas. Perdón, para las asociaciones feministas que se dediquen a financiar los cuidados que ejecutan las mujeres, a fin de que tengan más tiempo libre.

Eso sí, no sabemos qué cuidados, con qué periodicidad, con qué sujetos receptores, a cambio de qué. 

Lo importante es que "El Gobierno está donde tiene que estar y hace lo que tiene que hacer"

Tercera media aprobada por el Consejo: el PERTE de los residuos. Lo presenta Teresa Ribera que entretiene sus ocios con los ecoenvases y que, por cierto, tampoco nos explica en qué consiste el dinero que va a destinar a sostenibilidad. Eso sí: apenas llega a 500 millones, nada que ver con los 21.000 millones de euros del plan feminista de la podemita Irene.