Todo se relajará hasta que Marruecos quiera o necesite algo. Ahí, volverá a presionar con la migración
Más de un millar de migrantes, alrededor de 1.200, han intentado acceder a Melilla este jueves y alrededor de 350 lo habrían conseguido en el segundo salto consecutivo a la valla, según ha informado la Delegación del Gobierno, recoge RTVE.
Esta entrada se produce después del salto a la valla histórico de ayer miércoles, en el que participaron 2.500 subsaharianos y lograron entrar 491, y que se saldó con más de 40 heridos leves, 25 entre los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y 20 entre los migrantes que intentaban entrar en Melilla. Una vez que pisaron suelo español, se dirigieron a toda prisa al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI).
Madre mia! Ya llega la marabunta! Igualito que en la peli. 😰😰 https://t.co/XBEKDn5F2a
— Marta Oriol (@MartaOriol0707) March 2, 2022
Fuentes del Gobierno explican a La Vanguardia que detrás de este salto a la valla hay una “clara intencionalidad” por parte de Marruecos “para presionar” a España en un momento en el que las relaciones diplomáticas entre los países vecinos se comenzaban a reconducir.
“Es imposible que Marruecos no detecte una columna humana de 2.500 personas –en referencia a la formada ayer– que se mueve 15 kilómetros durante más de una hora”, explican fuentes gubernamentales a La Vanguardia.
Es imposible que Marruecos no detecte una columna humana de 2.500 personas –en referencia a la formada ayer– que se mueve 15 kilómetros durante más de una hora
Una pasividad por parte de Rabat, inciden las mismas fuentes, que recuerda a la vivida en mayo de 2021 cuando más de 10.000 inmigrantes lograron cruzar a nado la frontera de Ceuta ante la permisividad de los gendarmes marroquíes desatando un conflicto diplomático entre España y Marruecos. En aquel momento, fueron 10.000 personas tratando de cruzar la frontera en unas 48 horas; ayer lo intentaron 2.500 inmigrantes en cuestión de sólo un par de horas, recuerda el mismo medio.
Desde los sindicatos policiales explican que lo vivido ayer fue uno de los saltos “más violentos” en los últimos años. De hecho, más de una veintena de agentes de la Guardia Civil (25) y de la Policía Nacional (2) fueron heridos –de carácter leve– durante los momentos de máxima tensión. Fuentes policiales aseguran que los migrantes iban provistos con garfios, palos y tornillería en los zapatos, añade La Vanguardia.
Ante todo esto, el presidente de Vox, Santiago Abascal, pidió ayer al al presidente del Gobierno que rectifique y «se vuelva a plantear que Ceuta y Melilla estén bajo la protección de la Alianza Atlántica». En concreto, Abascal señaló: «Es un buen momento para plantear que en España también tenemos serios problemas y que nuestro propio ejército podría desplegarse en la frontera sur, en Ceuta y Melilla, para defender la integridad territorial y la seguridad de nuestros compatriotas, aunque a usted le dé la risa", recogió Vox.
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— VOX 🇪🇸 (@vox_es) March 2, 2022
El Gobierno de Pedro Sánchez deja a los agentes de la Guardia Civil totalmente desprotegidos y abandonados en la Frontera Sur.
Exigimos que se les entreguen los medios materiales y humanos necesarios para hacer frente a las violentas avalanchas de inmigrantes ilegales. pic.twitter.com/7A3bM3Pmh2
Asimismo, Abascal pidió a Sánchez lo siguiente: «Ha perdido usted una gran ocasión para hablar de fronteras, seguridad, de lo que está ocurriendo a nuestros compatriotas en Melilla en este mismo momento. Mientras usted intervenía a las 9:30h la valla de Melilla ha sido asaltada por 2.000 personas ilegalmente que han pasado por encima de nuestros guardias y policías. Probablemente porque otro sátrapa, el de Marruecos, ha percibido una vez más la debilidad de nuestro Gobierno y nuestras instituciones. Igual que Putin».
Es un buen momento para plantear que en España también tenemos serios problemas y que nuestro propio ejército podría desplegarse en la frontera sur, en Ceuta y Melilla, para defender la integridad territorial y la seguridad de nuestros compatriotas
Por otro lado, Abascal también se refirió a las demonizaciones que la izquierda y todo el Gobierno ejercen contra Vox de manera sistemática. El último ejemplo dice que Vox no quiere que los refugiados ucranianos sean acogidos. «No voy a rebatir todas las mentiras que ustedes plantean sistemáticamente sobre Vox, en la mayor parte de las ocasiones con la ayuda de los medios de comunicación en relación con nuestras alianzas internacionales o sobre los refugiados. No hay ninguna discriminación, es que nosotros distinguimos entre los que son refugiados y los que no lo son. Distinguimos entre los refugiados que huyen de una guerra y deben ser acogidos y esas oleadas de varones enviadas de manera premeditada para desestabilizar naciones y asaltar fronteras, lo distinguimos perfectamente, no hay ningún tipo de discriminación«.
Mientras, el jefe de la delegación de Vox en el Europarlamento, Jorge Buxadé, envió ayer miércoles una carta a los presidentes del Consejo, la Comisión y el Parlamento Europeo exigiendo una lucha eficaz contra la la invasión migratoria, informa VOX.
Buxadé, que hace hincapié en que “la situación está fuera de control”, recuerda que los refugiados ucranianos que huyen de la guerra, en su mayoría mujeres y niños, no tienen nada que ver con la invasión de inmigrantes ilegales que sufre España, “mayoritariamente hombres jóvenes en edad militar”. “Las comunidades de acogida están experimentando niveles vertiginosos de criminalidad y el colapso de los servicios públicos de los que solían beneficiarse”, subraya.
En su carta, Buxadé explica que ayer se reunió con funcionarios de la Comisión Europea y tuvo ocasión de comprobar que ni la UE ni varios Estados miembros tienen ninguna intención de poner freno a la inmigración ilegal de forma efectiva.
“Las formas de abordar este problema son sencillas y bien conocidas por todos”, subraya el portavoz de Vox. “Pero ignoradas”, añade. Y las resume: “Un mensaje claro tanto de la Comisión como de los Estados miembros afirmando que los inmigrantes ilegales nunca pisarán suelo de la UE, establecer plataformas regionales de desembarco en terceros países, más fondos para barreras físicas en las fronteras exteriores de la UE, así como vincular los fondos de desarrollo a una verdadera cooperación contra los traficantes de inmigrantes y una cooperación más fuerte en las devoluciones”.