Percibo entre algunos intelectuales católicos una preocupación tremenda sobre cómo va el mundo, un análisis político, geoestratégico, económico, cultural, etc, etc, etc.

Mejor no poner ejemplos porque no están los tiempos como para castigar a aquellos escasísimos intelectuales católicos con con posibilidad de llegar a un público grande, al menos mediano. Ya saben: si eres católico no puedes ser intelectual, o lo uno o lo otro.

Ahora bien, sólo recordar que lo que importa no es cómo marcha el mundo sino cómo va la Iglesia... y la Iglesia no va nada bien en el siglo XXI. Y sí, de la Iglesia depende el mundo, no al revés.

La desacralización de la Eucaristía es un síntoma más preocupante que la guerra de Ucrania, porque lo uno es causa, lo otro mero efecto

El siglo de las luces ha dado lugar al siglo más homicida de la historia, que hasta ahora es el siglo XX y empieza a ser el siglo XXI... que será el final de la era progresista y el de la resurrección de la sociedad cristiana.

La desacralización de la Eucaristía es un síntoma más preocupante que la guerra de Ucrania, porque lo uno es causa, lo otro mero efecto.