- Salario mínimo. Las promesas a ocho años vista son una estafa.
- No obstante su obsesión por el SMI es buena, sólo que de esa forma y chapucera.
- Y lo de la renta básica.
- No sabemos qué entiende el indocumentado de Pedro Sánchez por clase media.
- Renta básica. La buena gente no quiere vivir de limosna, quiere vivir de su trabajo.
- Lo peor del PSOE. Ama lo público, pero lo público no es lo que pertenece a todos sino lo que manipulan los políticos.
Dejamos a un lado las bestialidades de
Pedro Sánchez, como
su fervor eutanásico o su cristofobia, que le lleva a eliminar la religión de las escuelas.
Lo primero -¿lo único?- en lo que hay que aplaudir al PSOE es que ya ha lanzado su programa mientras el indolente Mariano esperará hasta noviembre, o quizás hasta vísperas de la campaña. Es su especialidad: productos de último minuto y generalmente chapuceros. Pero eso sí, la solución final sólo la conoce él... y suele ser horrible.
Y la mejor medida es la promesa de
subir el salario mínimo hasta el 60% del salario medio.... sólo que en dos legislaturas. Los jeta-socialistas, empezando por
Felipe González y siguiendo por
Zapatero, siempre hacen lo mismo: subiremos el salario mínimo en un corto lapso de ¡dos legislaturas! En ocho años, si es que están en el poder, nadie se acordará de ellos.
En cualquier caso,
Hispanidad ya le ha hecho las cuentas: esa promesa (que el SMI signifique el 60% del salario medio)
significa que el SMI debería pasar de los 756 euros brutos mensuales de ahora mismo a 1.308.
Pero lo de dicho: en ocho años nadie se acordará de ello y, además,
el salario medio se habrá visto incrementado por lo que el Mínimo no sería 1.300 (lo que ya es, ahora, en Francia o Reino Unido, dicho sea de paso) sino más.
En cuanto a la
renta básica, repetir lo de siempre: la buena gente no quiere vivir de limosna, quiere vivir de su trabajo.
Lo peor de todo el programa del PSOE:
cuando Curri Valenzuela le pregunta si va a bajar los impuestos asegura que sí, la clase media-trabajadora. Cuando la misma periodista inquiere qué entiende él por clase media, Pedrito no sabe qué responder y vuelve a arremeter contra los ricos que no pagan impuestos. Con lo fácil que hubiese sido decir algo parecido a esto: clase media es la que cobra entre 20.000 y 60.000 euros brutos anuales. Por ejemplo. Y así, nos quedamos sin saber cuánto promete reducir los impuestos el PSOE y a quién. Otra de trileros.
¿Cuál es el problema del fondo del PSOE más indocumentado de toda la Transición (bueno, no sé si más que el de Zapatero, es difícil)? Lo público. Sí, en su programa cultural simplemente defiende el gusto por lo público. Ese es el problema. El PSOE ama lo público y lo público no es lo que es de todos, sino lo que manipulan los políticos a su antojo. Por eso, a mí me gusta lo privado. Es mucho más justo, más libre, más solidario.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com