Ya hemos hablado, y seguiremos hablando, de la filtración de una futura sentencia del Tribunal Supremo norteamericano, pero ahora me interesa centrarme en el nudo de la cuestión. Se repite continuamente eso del "derecho al aborto". O sea, el derecho de una madre a matar a su propio hijo en sus propias entrañas: ¿en serio eso es un derecho? 

Por otra parte, el abortista no sólo es homicida, es, además, hipócrita, en hechos, conceptos y hasta en la propia terminología.

Mentiras y exageraciones: 

El 70% de los norteamericanos están por el derecho al aborto. Exacto, al igual que más del 90% de los norteamericanos, que, en 1973, sentencia 'Roe contra Wade', estaban por el derecho a la vida que eso sí que es un derecho.

Por cierto, Norma McCorvey, la mujer que pretendía abortar a su tercer hijo y que demandó bajo el seudónimo de Jane Roe, es decir, el origen del aborto en EEUU, se arrepintió después de lo que había hecho y denunció que había sido engañada por los aborteros. 

Claro que a nadie importó lo que dijo entonces: ya se había conseguido el infanticidio, probablemente el delito con más aire satánico de todos, porque se trata de acabar con la vida del más inocente y más indefenso de todos los seres humanos.

Más mentiras. Es la primera vez que un borrador de sentencia, que no un fallo, del Tribunal Supremo USA, se filtra a la prensa. Los llamados jueces progres de Estados Unidos han lanzado a la turba contra el Tribunal Supremo.

Y Joe Biden les apoya. Asegura que promulgará una ley que permita el aborto libre en todo Estados Unidos. 

El Tribunal Supremo, si se confirma el fallo, no ilegalizará el aborto sino que permitirá a los Estados que lo ilegalicen, que es distinto. 

Más mentiras. las mayoría en el Tribunal Supremo no es de 6 a 3 sino de 5 a 4, gracias a los nombramientos del protestante Donald Trump, mucho más provida que el católico Joe Biden. Así que, queridos amigos de la Vanguardia: Biden no ha llamado a los norteamericanos a defender "la capacidad de elegir de la mujer", a lo que ha llamado es a reducir los efectos del aborto que es un derecho constitucional en Estados Unidos desde hace 50 años. Mentira. El aborto está despenalizado desde hace cincuenta años en EEUU, que es distinto. 

Por tanto, queridos amigos de La Vanguardia, portada del miércoles 4 de mayo: ni se deroga el aborto ni se deroga "el derecho al aborto'. Lo primero, que es lo por que los defensores de la vida inocente apostamos, porque será cada Estado el que decida hasta dónde quiere llegar en su decisión sobre el aborto. 

Lo del "derecho al aborto", es una hipocresía y una salvajada propia de la época en la que vivimos, marcada por la blasfemia contra el Espíritu, es decir, llamar bueno a lo malo y malo a lo bueno. 

El aborto es mucho más que el aborto, es toda una filosofía de vida. Ceder en la muerte del inocente es una vergüenza. Pero una vergüenza muy generalizada, como puede verse en la portada de La Vanguardia correspondiente al miércoles 4 de mayo.