Sr. Director:
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha dejado claro que si el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, no está a disposición de la Justicia española es porque Bélgica ha vulnerado su obligación de entregar a quien es un perseguido por la Justicia en un país de la Unión Europa. El más alto tribunal europeo aclara que no se puede poner en duda que la justicia española cumple los criterios de calidad, independencia, rigor y seguridad jurídica como cualquier Estado democrático que forma parte de la Unión. Esta decisión, que resuelve una serie de cuestiones prejudiciales, supone un triunfo para el magistrado del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, instructor de la causa del “Procés”.