Señor Director:
El Gobierno social-comunista de Pedro Sánchez, no admite en absoluto que los padres utilicen el llamado “pin” parental, propuesto por VOX que es la necesidad de que los padres autoricen o no por escrito, que el Gobierno u otras Instituciones oficiales o paraoficiales u ONG, pretendan sustituir y usurpar su responsabilidad en la educación de sus hijos, tratando de adoctrinarles como crean conveniente, de acuerdo con sus convicciones contrarias a las de los padres que se preocupan de su educación moral y religiosa en valores desde su venida al mundo.
La Ministra de Educación Isabel Celáa, ha afirmado recientemente que “los padres no son los propietarios de los hijos” y desde luego tiene razón, los hijos son libres para orientar su vida, sus creencias y sus convicciones, sobre todo conforme van alcanzando más edad hasta que alcanzan la mayoría de edad.
También se dice en las redes sociales que el Santo Padre Francisco, dijo en una ocasión en el año 2017, que “los padres son custodios pero no propietarios de sus hijos”
Efectivamente, con el debido respeto a S.S. yo añado que no solamente son custodios, sino los máximos y principales responsables de la educación de sus hijos, desde su más tierna edad hasta que van creciendo y además son los casi únicos y principales responsables de su manutención hasta que alcanzan la mayoría de edad y consiguen su emancipación de la tutela de sus padres,
Así que no nos vengan con monsergas para implantar en nuestros hijos su doctrina perecedera y hacer de ellos pequeños socialistas y comunistas desde su más tierna infancia, para que luego pasen a engrosar las filas socialistas y comunistas y contribuir para el futuro a su mantenimiento en el poder democrático del Estado.
Que sepan que de ninguna manera vamos a consentirlo, fiados en la Constitución en su artículo 27.3 que dice: “Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones”
Me parece que está suficientemente claro y no hace falta añadir más. Como dicen en Perú los padres, “con nuestros hijos no os metáis” dejadlos en paz lo políticos y si acaso enseñadles a respetar la Constitución que nos dimos los españoles en 1978 y quizás también, enseñadles a comportarse pública y cívicamente respetando siempre a todas las personas con amabilidad o urbanidad, como decían y nos enseñaban nuestros abuelos.
Un cordial saludo
Roberto Grao Gracia
