Sr. Director:

Viendo los disturbios y la violencia que se ha desatado, y que indirectamente nos afecta a todos, no hay más remedio que insistir aunque parezca inútil; sin Dios, el caos, la vorágine. Este prodigioso personaje santanderino, famoso mundialmente, que está enterrado en la Catedral de Santander, pronuncio dos frases que, dada la gravedad de la situación actual de España, son de plena actualidad; decía que era católico a ”machamartillo” y la otra frase “España o es católica o deja de ser España”. Y estas frases nos dicen con toda claridad que una sociedad católica como era España, cuyos valores son la hermandad, la fraternidad, la paz, el servicio, el perdón, la unidad, etc. hacen una sociedad mucho más humana, más pacifica, más habitable, y todos estos valores provienen de la fe en Cristo, verdadero Dios y verdadero hombre.

En la situación actual esos valores podríamos decir que casi han desaparecido, de lo cual proviene el enfrentamiento, la desunión, el egoísmo y todos los separatismos que ahora padecemos en España. Por tanto lo que procede hacer es recuperar la identidad de España, que no es otra que ser católica y esta Religión es la que hizo de España una gran nación admirada y envidiada en todo el mundo. Si la mayoría de los españoles nos declaramos católicos, tenemos que ser consecuentes con nuestra fe, no se puede ser católico y al mismo tiempo apoyar un sistema político que ha desterrado a Dios. Por la cuenta que nos tiene y pensando en las generaciones futuras, tenemos que despertar de este sopor letal y vivir, por supuesto, con la ayuda de Dios, como portadores de la luz y sal para esta sociedad; así y sin emplear la violencia, podemos colaborar para convertir a España en una nación envidiable.