Sr. Director:

Insisto una vez más, yo hablo de lo que he vivido, de lo que me enseñaron. No hay nada más que un Dios Verdadero, lo demás son ídolos. Está en boga el ”Motu Proprio” del Papa Francisco. Yo no cuestiono el Vaticano II, ni la autoridad del Papa. Ahora me explico el sentido que tenía el rayo que cayó sobre la cúpula de la Basílica  de San Pedro en el Vaticano cuando renunció el Papa Benedicto XVI. El mismo Cristo anunció la Gran Tribulación que vendría sobre la humanidad. Se hacen muchas cábalas sobre lo que puede suceder en la Iglesia Católica.

Yo he vivido y experimentado y he sufrido el drama de la división de la Iglesia Católica; la nueva Iglesia no tiene nada que ver con la Iglesia que fundó Cristo, y el problema fundamental y no hay que darle más vueltas, consiste en la mundanidad y desacralización de la Divina Eucaristía. Dios nos ha regalado una prorroga por que hay muchas personas que han permanecido fieles. La nueva Iglesia, digámoslo sin componendas, es obra de Satanás. Hasta pueda ocurrir que haya una papista lesbiana como he visto en un comentario, pero eso nunca ocurrirá en la Verdadera Iglesia que Cristo fundó. Por tanto lo importante es permanecer fieles. Entiendo que cuando falte el Papa Francisco, habrá una situación de lucha dentro de la propia Iglesia, pero no hay que temer, Satanás y sus esbirros infiltrados en la Única y Verdadera Iglesia, serán barridos de la faz de la tierra. Todo lo demás son cábalas, imaginaciones, pero “Yo estaré con vosotros hasta el fin del mundo” eso dijo Cristo y eso ocurrirá. Todo lo demás es ciencia ficción.