De presumir de su amistad con Juan Carlos I a cargar contra él asegurando que ha sido "la mayor decepción de mi vida". Así es Miguel Ángel Revilla: llegó a declarar que «El Rey Emérito quiso hablar conmigo y no cogí el teléfono». Y en su línea, aprovecha cualquier ocasión -por ejemplo, una presentación de la Cabalgata de Reyes- para compartir su verbo fácil. 

Visto lo visto, mejor no ser amigo de presidente de Cantabria.