Los espectadores de la CNN dieron la victoria al presidente con un 48% frente al 40% del republicano. Para la CBS la diferencia fue todavía mayor: el 53% dio ganador a Obama frente al 23% que eligió a Romney

Las encuestan instantáneas celebradas por la CNN tras el tercer debate televisado entre Barack Obama y Mitt Romney dan la victoria al actual presidente de los Estados Unidos.

Un 48% consideró a Obama el ganador, frente al 40% que dio el visto bueno a Romney. Sin embargo, en la encuesta entre 521 votantes indecisos llevada a cabo por la cadena CBS, la diferencia fue más acusada. Un 53% respondió que Obama había sido el ganador, frente a un 23 % que se decantó por Romney. Y el resto, un 24% considera que el debate terminó en tablas.

Es evidente que el dominio y los conocimientos en política exterior de Barack Obama son muy superiores a los de su contrincante. Romney  se presentó a sí mismo en Boca Ratón (Florida) como un hombre de estado continuista y prudente. Tanto es así que se negó a contestar cuando el moderador le preguntó que haría "si el primer ministro de Israel le llamase una noche anunciando un inminente bombardeo de Irán". "Bob, no entremos en hipótesis.

A lo largo de su intervención, evidenció que el presidente de los Estados Unidos, en razón del cargo que ostenta, juega con ventaja.  Barack recurrió, además, a todo tipo de trucos efectistas y sarcasmos, como cuando recordó lo dicho hace tiempo por Romney, que Rusia era el mayor enemigo geopolítico frente a EE.UU.:  Advirtió que con Romney "la década de 1980 está pidiendo una nueva oportunidad en política exterior, porque, ya sabes, la Guerra Fría terminó hace 20 años". También ironizó sobre los conocimientos armamentísticos de su oponente. Romney se ha quejado en su campaña sobre la disminución de buques de la US NAVY: "También contamos con menos caballos y bayonetas" y por si no lo sabía, argumentó, "actualmente hay diferentes exigencias a las que teníamos en el pasado en temas de Seguridad Nacional".

Por su parte, Romney, pese a felicitar a Obama por la captura de Osama Bin Laden, criticó a su adversario electoral por su actitud ante la amenaza creciente en Siria, Libia, Mali, Egipto e Irán: "Hay que disponer de una estrategia integral para rechazar el extremismo", argumentó.  Pero la mejor frase de la noche pronunciada por el candidato republicano fue sin duda ésta: "Atacarme no es un programa".

El tema del atentado contra la Embajada de Bengasi fue eludido por ambos candidatos, aunque Romney lo ha utilizado en su campaña. Respecto a Afganistán, ambos coinciden en retirar las tropas en el 2014. Con respecto a Irán, Romney se ha mostrado más tibio  de lo que se esperaba de él. Es partidario, señala, de agotar la vía diplomática, ya que aunque desea estar comprometido en la defensa de Israel, la guerra es la última de las opciones.  

Sara Olivo
sara@hispanidad.com