En 1995 el mundo de la animación sufrió toda una revolución con el estreno de Toy Story, la primera película de dibujos animados generada por ordenador. Catorce años más tarde la genial empresa que fue pionera en esta nueva técnica: Pixar Animation Studios (unida ahora a Walt Disney Pictures) lanza la versión en 3D de este clásico infantil.
Por tanto, la película que ahora pueden contemplar en las novedosas salas de 3D es Toy Story I, que volverá a divertirles por su magnífico guión y que les resultará mucho más vistosa gracias a esta nueva técnica de exhibición que se aprecia, por ejemplo, en sus escenas de acción (persecuciones, caídas etc).
Si no recuerdan el argumento les doy unas pistas. La familia de Andy está a punto de mudarse, cuando en el mundo de los juguetes (liderado por el vaquero Woody) todo cambia cuando aparece en escena un nuevo muñeco favorito del niño: Buzz Lightyear, una figura de acción espacial basada en el protagonista de una serie de televisión. El problema es que Buzz no tiene asumido que es sólo un juguete y cree que es un verdadero astronauta que está en otro planeta.
Como ha ocurrido con todas las películas creadas por Pixar desde 1995, Toy Story, además de poseer una gran calidad técnica, cuenta una historia realmente original, humana, plagada de diálogos ingeniosos y divertidos, donde inequívocamente hay un mensaje positivo: en esta ocasión la importancia de la amistad para superar cualquier obstáculo. Todo esto aderezado de guiños llenos de humor más dirigidos (en ocasiones) a los adultos que a los niños (atención a la irrepetible secuencia de la caída de Woody y Buzz en la caja de los fanáticos hombrecillos verdes).
Si no han visto este clásico de Pixar desde hace años les garantizo que disfrutarán de nuevo como niños con esta gran película.
Para: Todos (adultos y niños) que disfruten del buen cine