Sr. Director:

La actitud moral más necesaria de cara el futuro no va a poder ser otra que la objeción de conciencia. Tal y como se está legislando en España y en las diferentes autonomías no nos va a quedar más remedio.

Sin ir más lejos, ayer leía en un periódico local de Santiago en relación a la Ley de Salud que se va a aprobar dentro de poco: "En algunos hospitales comarcales hay interés en practicar abortos". "Sanidad pretende favorecer que la sanidad pública gallega ofrezca más posibilidades de interrumpir el embarazo. La consellería anuncia que se incorporará esta prestación en algunos hospitales comarcales, donde hay profesionales jóvenes interesados, en el marco de la implantación del programa de salud de la mujer"….

Hay hospitales que han dejado de ser lugares donde se trabaja por la vida, la salud de las personas; ahora hay profesionales a los que les interesa en el marco de la salud de la mujer practicar abortos… Ésta es la propuesta de la Ley de Salud de Galicia. También decir que al día siguiente de leer esta aberración se informa de que el Foro Español de la Familia ha creado la RedMadre de apoyo a la mujer embarazada y busca coordinar esfuerzos con las organizaciones que trabajan en pro de la maternidad. Ésta es la realidad. Los servicios públicos, que pagamos todos, a favor del asesinato de los no nacidos y destrozar la maternidad de la mujer. Pagamos todos, pero ahí se acaba nuestra participación porque no se nos consulta sobre lo que luego nos va a ocurrir, como que a nuestras hijas les faciliten el aborto, o les administren la píldora del día después… Se legisla a nuestras espaldas, y esas leyes se aplicarán afectándonos a todos. No podemos admitir que en nombre de la salud de nadie, y menos de la mujer, se pueda justificar el aborto.

Teresa de Vallejo

devallejo@yahoo.es