Sr. Director:
Es bien sabido que el tiempo pasa volando, pero no para todos. Para aquellos que no están acostumbrados a pensar en los demás, ni ilusionados en formar una familia y sacarla adelante, ni deseosos de trabajar cada día mejor o con ganas de acercarse más a Dios, sí, para estos, el tiempo pasa muy despacio y sin pena ni gloria.

Pues parece que fue hace nada que celebrábamos las Bodas de Oro de los abuelos, y este año nuestros padres ya celebran treinta y nueve años de dichoso matrimonio. Y, lo mejor de todo, es que recuerdan ese día como si fuera ayer. Estos casi cuarenta años les han pasado como un lindo suspiro. Y uno piensa en la suerte tan grande que hemos tenido con estos padres que Dios nos ha regalado. Sí, por su generosidad abierta a la vida, dispuesta a recibir con ilusión y responsabilidad los diez hijos que Dios les envió, sabedores de que suyos son, y desprendidos del todo cuando Él dispuso que sólo cuatro de ellos permanecieran junto a ellos aquí en la tierra.

Y uno piensa en la inmensa suerte que hemos tenido con nuestros padres que nos han educado en la fe y nos han acercado a Dios, el secreto a voces de todo amor verdadero y eterno… como el de nuestros padres. Pues eso, felicidades de todo corazón por vuestro aniversario matrimonial. Sabed que estamos orgullosos de ser vuestros hijos y… ¡que Dios os bendiga!

Jesús Asensi Vendrell

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