Colombia estaba pendiente de la concesión de un tercer canal de televisión de ámbito nacional, abierto y privado. A ella aspiraban PRISA, Cisneros y Planeta, de los cuales los dos primeros se retiraron. Las sospechas de que Chávez estuviera detrás de Cisneros han circulado por el país, al tiempo que los dos canales restantes (RCN y Caracol) se esmeraron en criticar la concesión.
Finalmente, a instancias de la Procuraduría, el organismo encargado de arbitrar la concesión, la Comisión de Televisión ha suspendido el proceso. Grupo Planeta, el único aspirante que mantenía su propuesta, emitió este jueves 7 una encendida carta a la Comisión de Televisión de ese país, advirtiendo que terminar el proceso significaría un antijurídico mantenimiento del duopolio de los actuales canales nacionales. A juicio de Planeta, no continuar la concesión supone premiar la actitud de los otros dos canales colombianos, a los que acusa de desinformar: La revocatoria premiaría también a los actuales canales nacionales que durante todo el proceso, utilizando de manera abusiva los servicios otorgados en concesión por el Estado y desconociendo las elementales exigencias de la libertad de prensa y del deber de informar veraz e imparcialmente, se han dedicado en defensa del mantenimiento del duopolio que actualmente detentan.
Respecto a Prisa y Cisneros, Planeta denuncia en su comunicado que éstos abandonaron el proceso apremiados por problemas ajenos a la licitación, aunque adujeron públicamente problemas de estructuración del mismo. Planeta advierte que advirtió que recurrirá a la Justicia si se cierra definitivamente el proceso de concesión.