La compañía francesa hace aguas en España
France Telecom no invierte en España en nuevos servicios y no lo hará hasta que su filial no empiece a dar beneficios. Por el momento, el nuevo equipo rector enviado desde Francia (ya lleva más de 1 año) se dedica a reducir gastos más que aumentar ingresos.
Ahora, tiene ultimados 475 despedidos, 500 si lo quieren en cifras redondas, porque ese es el límite acordado, Bajas incentivadas y no-renovación de contratos pero eso, aunque hace menos traumático el asunto, no mejora la situación de la compañía. El tercer operador español continúa estancado. La solución: que la matriz invierta más en España. Si no, las pérdidas -1.500 millones de euros anuales- continuarán.