• Como no podía ser de otra forma después de darle Evo Banco a Apollo.
  • De esta manera, se abre el camino para que Guggenheim sea un potencial comprador de NCG Banco.
  • Esto significa que el subgobernador del Banco de España y presidente del FROB, Fernando Restoy, está perdiendo la batalla.
  • A partir de aquí las dos entidades nacionalizadas que se van a subastar serán para el mejor postor.
  • Y la clave, cómo no, está en si hay o no Esquema de Protección de Activos (EPA).

Los fondos pueden hacerse con los bancos nacionalizados, aunque previamente "tendrán que pasar por los trámites de idoneidad con las condiciones del Banco de España". No lo decimos nosotros, lo dice el gobernador del citado Banco de España, Luis María Linde (en la imagen). En realidad, no podía decir otra cosa después de adjudicar Evo Banco al fondo norteamericano Apollo.

Las palabras de Linde, pronunciadas este viernes ante la Comisión de Presupuestos del Congreso, abren el camino para que Guggenheim sea un potencial comprador de Novagalicia Banco (NCG) y dan a entender que el subgobernador del Banco de España y presidente del FROB, Fernando Restoy, contrario a que los fondos se hicieran con entidades financieras españolas, está perdiendo la batalla.

En cualquier caso, lo que sí se exige a estos fondos es un compromiso de permanencia. En el caso de Apollo con Evo, es de cinco años.

En resumen: las dos entidades que se van a subastar, NCG y Catalunyabanc (CX) serán para el mejor postor. "Es lo único posible y políticamente defendible. Hay que proteger el dinero del contribuyente y tomar decisiones sobre la adjudicación de las entidades a las ofertas más favorables desde el punto de vista de recuperar el dinero público", ha señalado Linde.

El problema es que este sistema de saneamiento del sector financiero, diseñado por el anterior gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordoñez (MAFO), es nefasto además de carísimo y, en ningún caso, garantiza la recuperación del dinero público.

Para entendernos: la ayuda directa del Estado en NCG Banco y CX supera ya los 21.000 millones de euros (9.000 para NCG y más de 12.000 para CX). Es dinero público -de todos los contribuyentes- a fondo perdido.

Pero ahí no acaba la cosa. Tal y como publicamos este jueves, ante la subasta de las dos nacionalizadas, los bancos exigen un Esquema de Protección de Activos (EPA), además de un crédito fiscal al modo italiano.

Concretamente, si NCG ha recibido 9.000 millones de euros, el FROB espera venderla por unos 1.500 millones (ya verán cómo al final la vende por menos de 1.000) y encima hay que aportar EPA, ¿cuánto dinero público se habrá recuperado al final Nada o cerca de nada.

Por cierto, a los fondos no les interesa el crédito fiscal pero el EPA sí y en las mismas condiciones que para los bancos.

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com