Sr. Director:

José Remohí, director del Instituto Valenciano de Infertilidad ha dicho que estamos en una nueva era, porque han conseguido que nazca un niño sin linfohistiocitosis de unos padres con predisposición a esa enfermedad. Para ello han fecundado cinco óvulos, y han elegido al embrión que no tenía la enfermedad.

Todos los periódicos dan la noticia como un gran avance, pero nadie se acuerda de los cuatro embriones humanos que sí eran portadores de la enfermedad. ¿Qué habrá sido de ellos? ¿Estarán congelados durante 10 años? ¿Los usarán para experimentar con ellos? ¿Los tirarán por el desagüe? ¿Los comercializarán?

Sin darnos cuenta, estamos aceptando la eugenesia: sólo los hombres perfectos tendrán derecho a nacer. El resto serán utilizados o vendidos, porque el Gobierno, con su nueva ley, permitirá el comercio de embriones. Me estoy imaginando el anuncio : se venden cuatro embriones con linfohistiocitosis, en perfecto estado para investigación sobre la enfermedad. Su nueva era me da mucho miedo, don José.

José Mª Saldaña Medina

univ.aragon@terra.es