El tertuliano de Onda Cero Albert Montagut comentaba también la frase de Ibarretxe, el este es un país de locos. Uno de los trabajos más difíciles que hay en el periodismo son las corresponsalías. Yo siempre he dicho que es lo más fácil. Es transmitir lo que más te choca de otro país. Si hoy fuéramos corresponsales de medios extranjeros en España, la entradilla estaría muy clara: estamos locos. Y podríamos poner toda la lista de temas de los conflictos que hay en este país. Y estamos locos, estamos en una espiral de paranoia que va creciendo. Cada semana hablamos de un episodio distinto, ahora ya se habla del tema de Ibarretxe, hace una semana de De Juana, y de Endesa, Gas Natural, del catalán. Sería mucho más fácil hacer una crónica para un periódico alemán, italiano o inglés. Tenemos un problema muy gordo encima de la mesa.
Antxon Urrusolo, también en Onda Cero, comentaba la comparecencia de ayer del lehendakari Ibarretxe ante el TSJPV por haberse reunido con Batasuna: El problema fundamental del nacionalismo es que en el fondo no reconoce la legitimidad del estado constitucional. Gran parte del nacionalismo rechaza cualquier sistema de poderes que no controle directamente. Un país cuyo gobierno permite que Josu Ternera presida la comisión de derechos humanos en pleno parlamento, es la locura. Un país que ha convivido durante 30 años con auténticos psicópatas a los que se ha tratado como hijos pródigos, psicópatas son los jóvenes con desequilibrios emocionales importantes que profanan tumbas.
Y Justino Sinova, en Onda Cero, también se refería a la comparecencia de Ibarretxe ante los jueces vascos y la manifestación de apoyo al lehendakari: aquí lo que hay es una operación de acoso para que el juez deje toda la acusación y pase a otra cosa. No sé si seguiría con la imputación, pero razones hay para imputarle, si no el juez no hubiese actuado. Y acusaba al gobierno vasco de ir contra el tribunal superior de justicia del País Vasco, al que no considera una institución.
