El Govern justifica la exigencia de este nuevo sacrifico por la situación de ahogo que atraviesan las finanzas de la Generalitat

La Generalitat ha hecho saber este jueves a los representantes sindicales de la Función Pública que este año los funcionarios catalanes volverán a dejar de cobrar una paga extra.

El anuncio se ha producido en la reunión de la Mesa de la Función Pública, donde los representantes del Govern no han querido precisar otras medidas que pueden afectar a los trabajadores del sector público en Cataluña.

La Generalitat ha citado de nuevo a los representantes sindicales el próximo miércoles, día 20 de febrero, a las 10:00 de la mañana. Los sindicatos han expresado su disgusto a la salida de la reunión, ya que estaba previsto que este jueves se les explicara el paquete de recortes que tiene previsto aplicar el gobierno catalán a la función pública. Han anunciado que habrá movilizaciones contra las medidas.

Un día antes de la reunión, Andreu Mas Collell, consejero de Economía de la Generalitat, advirtió en el pleno del Parlament que la situación de las finanzas catalanas es de "ahogo" y ello justifica exigir nuevos sacrificios a los empleados públicos.

La Generalitat persigue ahorrar en estos conceptos, al menos la misma cantidad, que el año anterior: 743 millones de euros. Y lo haría no sólo mediante la supresión de una paga, sino también extinguiendo las plazas vacantes de funcionarios que se jubilan o causan bajan, algo que ya viene haciendo desde 2010. También valora la no contratación de interinos durante determinados periodos. A juzgar por lo ocurrido este jueves, prefiere dar las malas noticias con cuentagotas.

Mariano Tomás
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